En la provincia de Buenos Aires hay cientos de magníficos lugares que se presentan como escapadas ideales para cualquier fin de semana del año, ya que son opciones buenas, bonitas, baratas y bien cerquita de la Capital Federal. 

Además de la variedad de atractivos y ofertas culturales, se encuentran las pintorescas localidades que componen la región bonaerense, siendo algunos destinos que parecen dignos del Caribe porque mantienen a la perfección todas las bondades naturales que le fueron dadas.

De hecho, ya sea que quieras aprovechar las temperaturas cálidas de la primavera o estés planeando las vacaciones de verano, hay varias localidades pequeñas que son “poco conocidas” y resguardan playas completamente soñadas donde las arenas son claras, el agua casi transparente y el silencio ensordecedor permite desconectar de todo. 

En esta oportunidad, presentamos un pueblo “desconocido” que se adapta tanto a los gustos de los grandes como chicos, dado que entremezcla todo el esplendor de una hermosa costa de río, la pesca, los deportes acuáticos, mucha historia y una variada gastronomía típica de la zona.

¿Cómo se llama el paraíso bonaerense "desconocido" donde las playas son de arenas blancas y agua transparente? 

A solamente 220 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la pequeña localidad de Ramallo se presenta como una nueva alternativa perfecta para hacer turismo de calidad, sin necesidad de recorrer grandes distancias y con cualquier tipo de presupuesto. 

Dada su ubicación geográfica, sobre la vera del río Paraná, limita con los partidos de San Nicolás, Pergamino, Arrecifes, San Pedro y la provincia de Entre Ríos, la cual está separada por el caudal mencionado. Además, se encuentra a pocos minutos de otros lindos pueblos como Vuelta de Obligado, Río Tala, Baradero, entre otros. 

. su vez, el acceso a este pintoresco lugar es sumamente sencillo porque se sale de CABA por la Panamericana o Ruta Nacional 9 en sentido al Ramal Escobar (Norte). Se conduce por dicho camino hasta el kilómetro 198, donde se encuentra el camino de ingreso, él cuál tiene un largo de 5 kilómetros de distancia. 

El principal atractivo es su extensa y bonita playa que se caracteriza por tener arenas blancas. Además, se destaca que se extiende por al menos a 3 kilómetros de largo y está decorada con bellas galerías de árboles, sombrillas y pequeños quinchos. 

Gracias a la tranquilidad de sus aguas transparentes, se pueden realizar diferentes deportes náuticos como paseos en veleros, kayaks, windsurf, entre otras alternativas. Sin embargo, el principal factor turístico termina siendo la pesca desde orilla o en pequeñas embarcaciones. 

A su vez, la costanera está equipada con la infraestructura idónea para que el turista tenga una estadía ideal. De hecho, se pueden encontrar desde parrillas, bares y restaurantes que regalan postales ideales de los atardeceres ribereños

El Paseo ribereño Viva el Río “Leandro Mansilla” donde los visitantes pueden descansar y realizar actividades recreativas y deportivas en familia, amigos o pareja. Además, ofrece una gran cantidad de opciones gastronómicas, alojamientos en cabañas y hoteles para vivir la experiencia de primera calidad.

La propuesta se completa con el Parque acuático de Ramallo, un espacio con 4 piscinas que incluyen toboganes, mangrullo, juegos infantiles y áreas de solarium húmedo y seco. Además, ofrece reposeras, sombrillas, bicicletas y kayaks.