A partir de la medianoche del domingo, los combustibles en Argentina tendrán un nuevo aumento. Los ajustes oscilarán entre el 1,8% y el 3%, afectando tanto a la nafta como al gasoil, y variarán según la región y la petrolera. Se trata del segundo mes consecutivo de incrementos, tras la baja de 1% aplicada por YPF en octubre.

En la Ciudad de Buenos Aires, donde YPF lidera el mercado, los precios actuales por litro son de $1.077 para la nafta súper, $1.332 para la premium, $1.092 para el diésel y $1.343 para el Infinia diésel. Con un aumento del 3%, estos valores podrían pasar a $1.109, $1.371, $1.124 y $1.383 por litro.

Llenar el tanque de un auto con una capacidad de 45 litros costará actualmente $48.465 con nafta súper y $59.940 con nafta premium. Con el aumento del 3% previsto para el domingo, los precios subirán a $49.905 para la nafta súper y $61.695 para la premium.

El alza responde a varios factores combinados: un ajuste del 2% mensual del tipo de cambio oficial, el leve incremento del precio internacional del barril de crudo, y una actualización impositiva. Desde el viernes, entró en vigor un aumento del 1% en los impuestos a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono, tal como lo establece el Decreto 1059/24.

Los impuestos actualizados agregan $12.551 por litro para la nafta sin plomo y $9.803 para el gasoil, entre otros conceptos. En el caso del sur del país, el gasoil tiene un adicional de $1.117 por tratamiento diferencial. Estas cifras son calculadas de acuerdo con la inflación oficial medida por el INDEC.

Shell, Axion y Puma seguirán la pauta de YPF, que domina el 60% del mercado. El impacto de estos ajustes será generalizado y refleja no solo el contexto inflacionario, sino también las decisiones fiscales del gobierno del presidente Javier Milei. En este escenario, llenar el tanque se convierte en un desafío cada vez mayor para los argentinos.

Ocho meses consecutivos de caída en las ventas de combustibles en Argentina

El mercado de combustibles en Argentina atraviesa ocho meses consecutivos de bajas en las ventas. Según datos de la Secretaría de Energía, octubre cerró con una caída interanual del 10,41%, lo que refleja el impacto de la inflación y el menor consumo de los hogares y empresas.

En octubre, las estaciones de servicio vendieron 1.434.689 metros cúbicos de combustibles, frente a los 1.601.453 m³ despachados en el mismo mes de 2023. Este descenso se sintió especialmente en el gasoil común, que cayó un 19%, mientras que el gasoil premium registró una baja del 5%.

Por su parte, las naftas también reflejaron números negativos. La nafta súper disminuyó un 1,6% en el décimo mes de este año, pasando de 618.222 a 608.071 m³. La nafta premium, en cambio, mostró una caída más pronunciada, con un retroceso del 21%, alcanzando apenas 201.323 m³ comercializados en octubre.