Algo que acentuó la permanencia del coronavirus en nuestro planeta fue el teletrabajo, ya que, al no poder asistir de forma presencial a empresas, industrias y colegios, entre otros, este método, que poco se utilizaba en la Argentina, creció a pasos agigantados en el 2020 y se estima que lo hará de igual manera, o quizá más, este año.

Es importante resaltar que el año pasado las empresas y organizaciones públicas y privadas vieron la necesidad de implementar repentinamente para sus colaboradores y empleados, esta opción de trabajo desde sus casas todo el tiempo que fuese posible.

Las consultoras informáticas sostienen que para el 2021 la situación no parece cambiar y todo indica que el teletrabajo llegó para quedarse; por ejemplo, en Estados Unidos se estima un ahorro aproximado de 10.000 de dólares por empleado por año en inmuebles e instalaciones, y un ahorro de 78.000 millones por año por la disminución de embotellamientos de tránsito, cifras aportadas por organismos locales.

Ventajas para el trabajador y el empleador

En nuestro país no se manejan esas enormes cifras, pero la llegada del teletrabajo significó una serie de ventajas tanto para el empleado como para el empleador: para el trabajador son las siguientes: 1) esta fórmula es eficaz para equilibrar con éxito la vida profesional y la felicidad personal al tener un mayor nivel de libertad, 2) el teletrabajo puede mejorar su nivel de vida al poder realizar el trabajo desde casa, un entorno de seguridad y bienestar emocional,
3) adaptación del horario de trabajo en función de las propias necesidades personales; esto aporta un mayor nivel de respuesta para atender posibles imprevistos de última hora en la agenda, 4) al evitar las comidas fuera de su casa y el costo del transporte urbano le permite un ahorro extra cada mes y 5) el teletrabajo permite una mejor gestión del tiempo, al no tener que depender de factores externos como los atascos en el tránsito para ir y volver a la oficina o empresa, o los horarios del transporte público. Este gestión del tiempo puede tener consecuencias muy positivas en su productividad, pudiendo aprovechar las primeras horas del día para sacar más cantidad de trabajo.

En tanto, para la empresa se optimiza de la siguiente manera: 1) permite reducir los costos de infraestructura en las instalaciones al poder ahorrar espacio, 2) los procesos de selección de personal permiten conectar con mejores candidatos al poder establecer colaboraciones de trabajo a distancia, 3) esta metodología de trabajo también reduce el absentismo laboral, ya que el trabajador tiene una disposición de horario para gestionar su agenda de trabajo en beneficio de la conciliación laboral, 4) desde el punto de vista corporativo, el teletrabajo
fideliza a los profesionales más exigentes que valoran esta forma de colaboración como un ingrediente que mejora su calidad de vida y 5) la empresa prioriza el trabajo por objetivos, en lugar de seguir enfocando el valor en la gestión del tiempo. Y este cambio de mentalidad acorde a las necesidades del presente marcado por la revolución tecnológica mejora la marca corporativa de la empresa y, sobre todo, hace aumentar la productividad de los empleados.

Cuidados en el Internet

Sobre la actualidad del teletrabajo, Gabriel Zurdo, CEO de BTR Consulting, relató que “con miles de millones de usuarios y el uso diario, continuo y permanente, se disparó el riesgo y la exposición. Las plataformas de redes sociales, el teletrabajo, home office, las decenas de apps que descargamos en nuestros smartphones, que se volvieron aparentemente necesarias para sobrevivir en cuarentena, se convirtieron en una mina de oro para los cibercriminales y estafadores”.

Algunos datos aportados por esta compañía indican que en el mundo 3.300 millones de empleados fueron afectados por la pandemia, que entre el 25 y el 30% trabajará varios días por semana desde su casa para fines de 2021. Además, el 50% de la fuerza laboral hace
trabajo a distancia, de los cuales el 15% ya había tenido la experiencia y el 35% son nuevos “teletrabajadores”, es decir, cifras que se estima que pueden seguir en alza.

Punto a tener en cuenta

Lo cierto es que la gran mayoría de los trabajadores remotos sostiene que en esta “nueva normalidad”, el teletrabajo no afecta su productividad y su comunicación, pero que la fatiga mental es evidente. La comodidad y el confort, la prevención y el cuidado de la salud física también toman relevancia.

“Resulta evidente que es necesario trabajar sobre todo en la educación y la concientización en todos los niveles de las organizaciones y sociedades. El factor humano comienza a ser determinante por encima del tecnológico para protegerlas. La capacidad de adaptarse a un futuro aún más digital depende del desarrollo de habilidades, acortar brechas, empoderar a los líderes y formar a sus equipos”, agregó Javier Queimaliños, miembro de la misma empresa.

Opinión de los encuestados

Ahora bien, conocidas las ventajas que puede traer el teletrabajo para un empleador o un empleador, es interesante conocer cuál es la opinión del trabajador, si le parece mejor trabajar en casa o ir a su lugar de empleo.

Los números indican que un 19% de los encuestados asegura que preferiría seguir trabajando siempre desde su hogar, mientras que apenas un 6% sostiene que quisiera trabajar desde la oficina cuando se levanten todas las restricciones por la pandemia.

Más datos del sondeo

Un 47% de los argentinos prefiere un formato mixto de oficina y trabajo remoto como formato ideal y permanente cuando pasen los efectos de la pandemia de coronavirus, de acuerdo con una encuesta realizada por una empresa de servicios de recursos humanos.

Las opciones se completan con el 17% que elegiría una opción que le diera flexibilidad para
cambiar con libertad sus horarios de trabajo, el 6% que se inclina por un formato que le
permite elegir cuándo trabajar desde el hogar, y un restante 5% de los trabajadores argentinos
optaría por trabajar de forma remota desde cualquier lugar.

Una realidad sí es cierta, ya sea por pandemia o no, el teletrabajo viene “pidiendo pista” hace
rato y con el coronavirus se terminó de potenciar esta actividad, que para muchos es la clave
del futuro.

¡Peligro! Cyberdelincuentes en las redes

Si bien la llegada del teletrabajo parece traer diversos beneficios para trabajadores y empresarios, hay un punto clave que no puede pasar desapercibido. Se trata de la seguridad en las redes y los peligros que conlleva el mal uso de estas, algo que suele ser utilizado para prácticas ilegales por parte de hackers o delincuentes que habitan en Internet.

La falta de seguridad entre los sistemas de comunicación de las empresas y los hogares de los empleados es uno de los principales puntos a tener en cuenta, ya que se trata de los accesos a los ciberdelincuentes, siendo el "phishing" la forma de fraude más común que puede poner en riesgo la fuga de información de las empresas y también de las personas, debido a que se crean accesos a los sistemas que no estaban pensados para ser accesibles desde la casa.

En cuanto a las tareas de cuidado, toda persona que ejerza el derecho a interrumpir la tarea "deberá comunicar en forma virtual y con precisión" el momento en que comienza la inactividad y cuando finaliza a la empresa.

Reglamentación de la ley

Tras su aprobación en julio de 2020, hace unas pocas semanas el gobierno nacional reglamentó el Régimen Legal del Contrato del Teletrabajo, que regula esta “nueva” modalidad laboral en ciertas actividades que, por su naturaleza y sus particulares características, así lo permitan.

El primer artículo de esta nueva normativa establece que “las disposiciones de la Ley Nº 27.555 no serán aplicables cuando la prestación laboral se lleve a cabo en los establecimientos, dependencias o sucursales de las y los clientes a quienes el empleador o la empleadora preste servicios de manera continuada o regular”.

Tampoco se podrá “en los casos en los cuales la labor se realice en forma esporádica y ocasional en el domicilio de la persona que trabaja, ya sea a pedido de esta o por alguna
circunstancia excepcional”.

En tanto, el artículo 5°, referido al derecho a la desconexión digital, precisa la ley de teletrabajo que cuando “la actividad de la empresa se realice en diferentes husos horarios o en aquellos casos en que resulte indispensable por alguna razón objetiva, se admitirá la remisión de comunicaciones  fuera de la jornada laboral”.

POR G.A.