E l dato fue dado a conocer a mediados de junio pasado y significó una señal para prestarle atención: el consumo de carne vacuna cayó a su peor nivel en 100 años en la Argentina , con apenas 47,8 kilos per cápita . La cifra surgió de proyecciones realizadas por la Bolsa Bolsa de Comercio de Rosario y el Instituto de la Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), que atribuyeron este derrumbe a la crisis económica, la pobreza y un cambio de paradigma en los gustos de parte de la población .

En tiempos de inflación con un piso del 5% y un acumulado del 36,2% en lo que va de 2022, hay precios que ponen un freno a la hora de encarar la góndola. Y así como los cortes vacunos pierden espacio en la elección de los argentinos, los de carne de cerdo ganan cada vez más lugar . En la actualidad, su consumo es de 20 kilos por habitante por año , una cifra récord que seguirá en alza, de acuerdo con un estudio privado.

Las principales razones

Dirigentes del sector y carniceros destacaron a Crónica el crecimiento de este producto en las compras diarias y señalaron a la cuestión económica como el motivo central. "La carne de cerdo suele ser entre un 20 y un 40% más barata que la vacuna", explicó Juan Luis Uccelli, consultor de esta industria y ex presidente de la Asociación Argentina de Productores de Porcinos. "Cuando el bolsillo está flaco, no decide la voluntad de compra del consumidor, sino su poder adquisitivo", aseguró Miguel Schiariti, titular de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados (Ciccra).

El aumento en el consumo de los cortes de cerdo empezó en 2002. Entonces, era de cuatro kilos por habitante por año. Diez años después, ya superaba los diez kilos. Y ahora, tal como se dijo, alcanza niveles récord. Más allá de lo económico, Uccelli menciona otras dos razones en este escenario. "Se trabajó mucho en la promoción del producto. Lo mismo en el diálogo con médicos en base a información científica y el acercamiento a las escuelas de chef. Había gente que consideraba a la carne de cerdo mala para salud. Y además, no sabía cocinarla", recordó el especialista.

"Es cierto que se hizo la tarea de promoción pero también aparecieron las oportunidades. La carne vacuna fue dejando espacio por temas políticos ya conocidos y ese lugar comenzó a ocuparlo el cerdo", indicó Uccelli.

Los beneficios nutricionales de este alimento

Más allá de haberse convertido en un producto al que los argentinos recurren en la actualidad para cuidar el bolsillo, el Senasa fomenta el consumo de la carne de cerdo, ya que genera beneficios para la salud por su bajo contenido en grasas. “El desafío que tiene el sector es continuar creciendo para que esos cortes saludables estén en la dieta cotidiana de la población. Es carne saludable de altísima calidad nutricional, y con una sanidad de excelencia”, afirmó el vicepresidente del organismo, Rodolfo Acerbi.

Durante largo tiempo, agregaron desde el Senasa, la carne de cerdo sobrellevó una fama de alimento con alto contenido en grasa y asociado al aumento de colesterol. Sin embargo, estudios científicos comprobaron que aporta equilibrio nutricional en relación con su contenido en proteínas de alto valor.

Precios en mostrador

Las diferencias en los valores, tal como se dijo, resultan clave en la elección de este producto. Mientras el kilo de pechito de cerdo cuesta $790, el de asado sale $1.280. La paleta de cerdo se cotiza en $790 el kilo y la de carne vacuna, en $1.090. A su vez, el matambrito de cerdo arranca en $890 y el matambre tradicional, en $1.290. "En 2012, con un kilo de asado, comprabas entre 700 y 800 gramos de pechito. Hoy, con lo que sale el asado, conseguís un kilo y medio de pechito. Esa es la relación", compararon en el sector.

¿Cuáles son los cortes de cerdo más consumidos por los argentinos? "Carré y matambrito", comentó Nicolás Suksdorf, empleado de una carnicería del conurbano. "Bondiola, pechito, churrasquito y paleta también aparecen entre los más llevados por los clientes", señaló Gabriel Prieto, carnicero con larga experiencia en el sector. A esa lista se suman los cortes del jamón, de los cuales salen nalga, cuadrada, cuadril, bola de lomo y peceto.

A futuro, Schiariti no imagina un aumento en el consumo de la carne vacuna en el país. "Se mantendrá la tendencia actual", proyecta el presidente de Ciccra. En cambio, Uccelli anticipó que seguirá el crecimiento en las compras de corte de cerdo. "En menos de diez años vamos a estar consumiendo 30 kilos por habitante por año. La ventaja del cerdo es que no tiene un techo, siempre y cuando cumpla con la premisa de ser más barato que la carne vacuna", concluyó.

Cómo evolucionó su precio en la última década

En los últimos días un estudio privado analizó la evolución de los precios de las tres carnes (vacuna, cerdo y pollo) dolarizados y por kilo promedio anual, junto con la evolución del Salario Básico promedio anual en la Argentina, también expresado en moneda estadounidense.

Y, en ese sentido, concluyó que los cortes de cerdo fueron los únicos que, durante la última década, acompañaron de cerca la fuerte caída del poder adquisitivo en el país.

Mientras el salario tuvo una caída básica real en dólares del 44,8% en este período, el cerdo sufrió una baja del 41%, la más cercana a los sueldos. De ahí el análisis de los referentes de este sector, que afirman que este producto “se ve todas las semanas en dos o tres platos de la mesa de los argentinos ”. Y proyectan un crecimiento de cara a los próximos años.

Por ST