Primero fue un freno o estancamiento en el descenso de los contagios y fallecimientos por coronavirus en la provincia de Buenos Aires y en la Capital Federal. En los útimos días, las cifras empezaron a aumentar. Aún se está muy lejos de lo que fueron los "picos" de nuevos casos y decesos en el Área Meropolitana de Buenos Aires (AMBA), pero las autoridades sanitarias tanto de Nación, como de CABA y del distrito bonaerense consideran importante buscar la forma de cortar o atenuar la tendencia cuanto antes.

Mientras se espera por la llegada de las vacunas de Rusia y de otros países, que por lo que se sabe no comenzarán a llegar de manera masiva hasta dentro de 30 días por lo menos, los funcionarios de los distintos niveles, incluyendo los intendentes del conurbano, siguieron con lógica preocupación las imágenes de las multitudes amontonadas en diversos locales comerciales, con el peligro de transmisión masiva del Covid-19 que esas situaciones implican.

En diálogo con Crónica HD, los intendentes de Morón, Lucas Ghi, y de Florencio Varela, Andrés Watson, coincidieron en señalar que "ningún escenario se descarta" en cuanto a tratar de encauzar la situación sanitaria y reiteraron el pedido a los vecinos de "respetar las recomendaciones para cuidarnos entre todos, porque el virus no está erradicado".

Asimismo, ante las situaciones de rebrote o de "segunda ola" de contagios que se observan en varios países del Hemisferio Norte, la preocupación de los gobernantes pasa por seguir concientizando a la población. Pero más allá de eso, una vez pasadas las fiestas de Navidad y Fin de Año, que además de tener su importante contenido famliar y social han sido motivo de cierto repunte en la actividad comercial, podrían disponerse medidas restrictivas para reducir la circulación de personas, con el fin de anticiparse y atenuar el impacto de la nueva ola de contagios, fenómeno que lamentablemente los infectólogos y otros especialistas ya dan por descontado que ocurrirá tanto en la Argentina como en todo el Hemisferio Sur.

El alcance de esas restricciones no está definido por el momento. Pero de hecho, la primera medida en ese sentido se tomó con los pasajeros del último vuelo que llegó procedente de Gran Bretaña tras la aparición de una nueva cepa de Covid-19. Todos ellos deberán hacer una cuarentena obilgatoria de siete días.