Paola Elizabeth Coquiara, ex amante de Martín Del Río, el hombre acusado de matar a su madre y a su padre en el interior de su casa, testificó en el caso y dejó una frase impactante al considerar que la próxima víctima fatal de su anterior interés romántico “podía ser yo”.

El empresario es el principal acusado por el doble parricidio en Vicente López, apuntado por la Justicia por asesinar a su papá, José Enrique Del Río (75); y a su madre, María Mercedes Alonso (72), en agosto del 2022.

Coquiara fue citada por los fiscales Alejandro Musso, Marcela Semería y Gastón Larramendi a declarar en el Tribunal N°7 de San Isidro.

Tras la declaración de Cecilia Sánchez, ex esposa de Del Río, Coquiara aseguró que jamás supo de la existencia de la pareja del acusado, y que se enteró luego de difundirse el caso en los medios de comunicación.

La mujer se desempeña como agente inmobiliaria. Fue en ese contexto en el que conoció al acusado: él se interesó en una propiedad en alquiler y la contactó, con la relación avanzando en 2021 hasta seis días antes del crimen.

Sin saberlo, la mujer había acompañado a Del Río desde CABA a Vicente López caminando por el mismo recorrido que el presunto homicida realizó para escapar de la escena del crimen. Para la Justicia es el "hombre caminante", cuando se revelaron las primeras imágenes de las cámaras de seguridad de la zona huyendo del la casa de sus padres.

En su declaración indagatoria admitió "admirarlo comercialmente" considerándolo "una persona inteligente". Sin embargo, ya no piensa lo mismo, a lo que ahora cree que "es hábil para mentir" e incluso "verborrágico", capaz de "convencer siempre a la gente de que le creyeran”.

A medida que iba conociendo a Del Río, Coquiara comenzó a descubrir irregularidades en su acciones en el plano de los negocios inmobiliarios y que siempre tenía dificultades para pagar el alquiler.

Hasta comenzó a sentir "inseguridad" por sus irregularidades, sobre todo por la deuda que mantenía con ella de 18 mil dólares. "Yo me imaginaba que se había metido en algún lío del que yo no sabía nada. Un ajuste de cuentas. Y eso me dio miedo", comentó en la audiencia.

"Quería ir a México porque me daba miedo quedarme acá. Quería irme hasta que se esclarezca. Pensé que la próxima podía ser yo", dijo Coquiara cuando le pidió al menos "15 mil dólares" de la deuda para escapar una vez conocido el homicidio, considerando que se trataba de un ajuste de cuentas.

Sobre las imágenes del "hombre caminante", se quebró en ante el tribunal popular al reconocerlo. “Es él. Y es el mismo recorrido que hizo conmigo. Él es el caminante, lo reconozco (...) Después de verlas colapsé y terminé internada un mes porque me di cuenta lo que había pasado", añadió.

Por último, respecto a la denuncia del acusado diciendo que su ex empleada doméstica, Nina Aquino, mató a sus padres, Coquiara jamás creyó en esa hipótesis ya que trabajó muchos años con su madre y que "la apreciaba".