El primer ministro británico, Boris Johnson, anunció este jueves su dimisión luego de que una avalancha de renuncias en su Ejecutivo por varios escándalos éticos hiciera evidente que ya no tenía el apoyo de su Partido Conservador y era incapaz de gobernar.

Es claramente la voluntad del grupo parlamentario conservador que haya un nuevo líder del partido y, por tanto, un nuevo primer ministro. Seguiré (como premier) hasta que haya un nuevo líder”, expresó Johnson, quien también declaró que "en política, nadie es ni remotamente indispensable".

En una muestra de su determinación a seguir al frente del Gobierno hasta último momento, Johnson dijo que nombró a varios ministros para reemplazar a otros que renunciaron descontentos con su gestión de los escándalos.

"El proceso de elección de un nuevo líder debería comenzar ya, y el cronograma será anunciado la semana próxima. Y nombré a un gabinete para gobernar, como lo haré yo, hasta que haya un nuevo líder conservador", detalló.

El premier, en el poder desde 2019, había rechazado llamados a renunciar de integrantes de su propio gabinete pese a la dimisión de unos 60 miembros de su Ejecutivo, incluyendo a cinco ministros, en las últimas 48 horas.

Johnson, de 58 años, logró permanecer en el cargo casi tres años pese a acusaciones de cercanía a donantes del partido, a que protegía a funcionarios de su entorno denunciados por malos tratos o corrupción, de que engañó al Parlamento y a la ciudadanía sobre fiestas celebradas en su residencia oficial durante el confinamiento por coronavirus.

El último escándolo fue la reciente revelación de que Johnson estaba al tanto de acusaciones de acoso sexual contra un diputado conservador, Chris Pincher, antes de que lo promoviera dentro de la jerarquía del partido. 

Pincher renunció la semana pasada como segundo de la bancada conservadora luego de denuncias de que había manoseado a dos hombres en una discoteca. Eso destapó informaciones de acusaciones similares que se remontaban a años y explicaciones cambiantes del Gobierno, que finalmente dijo que Johnson conocía las alegaciones pero se había "olvidado" de ellas cuando lo nombró.

La catarata de renuncias en el Gobierno de Johnson

La catarata de renuncias comenzó el martes con el ministro de Economía, Rishi Sunak, y el ministro de Salud, Sajid Javid; pesos pesados del Ejecutivo responsables de lidiar con dos de las cuestiones más importantes que enfrenta el Reino Unido: el costo de vida y el coronavirus.

Los ministros para Gales, Simon Hart, y para Irlanda del Norte, Brandon Lewis, sumaron este jueves sus dimisiones, y horas más tarde fueron imitados por la ministra de Educación, Michelle Donelan, a la que Johnson había designado el martes.

Johnson reemplazó hoy a Hart por el ex ministro de Justicia Robert Buckland, y a Lewis por el diputado Shailesh Vara. Varios referentes del Ejecutivo, entre ellos su hasta ahora incondicional defensora Priti Patel, ministra del Interior, fueron anoche a Downing Street, la residencia oficial del premier, a decirle que había perdido el apoyo de su Partido Conservador y que no puede continuar, pero la respuesta fue la destitución del ministro de Vivienda, Michael Gove.