¿Estás buscando un lugar para visitar este fin de semana? A poca distancia de la Ciudad de Buenos Aires y dentro del partido de Chivilcoy se ubica Ramón Biaus, una pequeña localidad rural que es visitada por decenas de turistas que buscan tranquilidad y paz por algunas horas. Asimismo, este lugar se destaca por su gran propuesta gastronómica que se caracteriza no solo por la sabrosura, sino que también por ser casera, hecha con mucho amor y realizada con productos regionales. 

Este pueblo es una escapada ideal para hacer en pareja o con amigos, ya que se encuentra a solamente 188 kilómetros de Capital Federal y a unos 35 de la ciudad cabecera del municipio. Llegar hasta las pacificas y arboladas calles del sitio lleva más o menos 2 horas de viaje en vehículo, pero en sí el trayecto es directo y simple de seguir. Desde CABA salir por la Autopista Acceso Oeste hasta Luján, donde se empalma con Ruta Nacional 5. A la altura de Chivilcoy doblar por la Ruta Provincial 30, continuar por la Ruta Provincial 44 y luego tomar el camino Manuel Belgrano que lleva a la puerta del paraje. 

Un poco de historia de la localidad 

Como muchos pueblos de Argentina, su origen se da gracias a la extensión del servicio de tren de pasajeros. En este caso particular, en 1909, Ramón Biaus donó pate de las tierras de la estancia  llamada “El Carmen”. Luego, el Ferrocarril General Belgrano instaló la estación de la zona y Arturo L. Patrón fundó la localidad como tal, ya que se instaló junto a su familia. Tiempo después delineó la infraestructura que caracterizaría a la región, trazo de su infraestructura y vendió sus tierras para que llegaran personas para trabajar las tierras fértiles.

Poco a poco se fue construyendo el paraje que actualmente tiene 179 habitantes, debido a la cancelación del transporte público. Hoy en día muchas de las viviendas del pueblo son utilizadas como espacio de descanso y pertenecen a gente que vive cotidianamente en la ciudad de  Buenos Aires. Asimismo, se están realizando diversas actividades para fomentar el turismo por el área rural y de esta manera se espera que los vecinos vuelvan a resurgir como en el pasado. En los últimos años, se ha inaugurado distintas fabrican que provee de trabajo fijo a las personas que se encuentran allí. 

Si bien la estación no tiene uso, está muy bien mantenida. 

El turismo como un motor de crecimiento 

Como todo pueblo de campo, los visitantes son fieles amantes de la tranquilidad y no hay dudas que Ramón Biaus es un lugar perfecto para descansar y pasar un fin de semana distinto lejos de la loca y agitada vida en las grandes ciudades de la provincia. Dentro de los atractivos de la localidad se distingue su infraestructura vieja tipo colonia con ladrillos a la vista y pintorescas calles donde los árboles permiten tener una sombra admirable en el verano y un aire fresco que hace muy bien para el estrés. 

Continuando con el paseo por el casco histórico, se pueden encontrar el Club Social que no solo es el centro de reunión de los vecinos, sino que allí se hacen algunas de las fiestas populares. Asimismo, se encuentra la linda capilla "Nuestra Señora de los Dolores" que surgió por iniciativa de Zenobia Ramallo de Patrón. En este espacio religioso cada 15 de septiembre se realiza la festividad de la santa con una gran celebración. 

La capilla del pueblo es muy acogedora. 

La gastronomía es el personaje principal de la localidad 

A lo largo de sus cuadras de piedra y tierra hay almacenes donde se pueden adquirir distintos productos de campo y comidas regionales como dulces y fiambres. Sin embargo, cabe destacar que Ramón Biaus tiene dos estrellas que son un clásico del sitio y que el turista no puede dejar de visitar. Por un lado, está “Los Surtidores” que es una cervecería que se caracteriza por su estilo retro, ya que está instalada dentro de una vieja estación de servicios y además, dentro hay más de una decena de elementos que permiten conocer a profundidad la historia del pueblo y que es un viaje al tiempo pasado

Por otro lado, el imperdible de la localidad es el restaurante de campo "Lo del Turco", que se encuentra en una vieja casona de época, y se destaca por su riquísima comida casera. Entre sus platos más populares se pueden nombrar las empanadas de Marta hechas de carne cortada a cuchillo y fritas; los ravioles de Doña Nelly que son amasados con mucho amor y las abundantes picadas. Debido a la gran cantidad de personas que reciben los fines de semana, recomiendan reservar antes de ir al lugar.