La provincia de Buenos Aires tiene un sinfín de rincones "desconocidos" que son sumamente atractivos para conocer en cualquier momento del año, ya sea en familia, pareja o amigos. Asimismo, estos pintorescos sitios, se destacan por tener un largo legado de acontecimientos que conforman la historia de nuestro país.

Más allá de las clásicas escapadas a la Costa Atlántica y las sierras bonaerenses, creció considerablemente el turismo rural que es una excusa perfecta para desconectarse del bullicio de la ciudad, disfrutar de la naturaleza local y saborear los mejores platos de la gastronomía nacional.

Abbott es un pequeño pueblo del partido de Monte. Su principal atractivo radica en su cercanía con la Capital Federal, lo que lo transforma en su sitio ideal para descansar de la "locura" de la rutina diaria. Sin embargo, por estas mismas características y otras virtudes, este lugar tiene como "Huésped Ilustre" al mismísimo Joan Manuel Serrat, quien los elige cada vez que viene de gira por el país. 

Descubrí el pueblo de Abbott.

¿Dónde queda Abbot? 

Esta pequeña localidad es un destino muy elegido a la hora de hacer turismo local, ya que se encuentra a solamente 97 kilómetros de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, es decir, en auto está a poco más de una hora de viaje. Asimismo, está ubicada a media hora de la cabecera del municipio de San Miguel del Monte.

Otra gran ventaja de este sitio es que llegar al pueblo es muy fácil porque simplemente se debe tomar la Riccheri y empalma con la Autopista Ezeiza- Cañuelas. Seguir camino por dicho camino hasta donde finaliza y tomar la salida de la Ruta Nacional 3 que se dirige a la entrada del lugar. 

En el caso de no tenés vehículo privado, existe la posibilidad de ir en transporte público. Desde Plaza Constitución, tomar el servicio que se dirige a Ezeiza y combinar con el ramal que se dirige a Cañuela. Una vez que llegues a chica localidad, hacer el trasbordo con el tren a Monte que para en Abbott. En este caso, este tipo de traslado lleva más o menos 3 horas.

Un repaso por la historia de Abbott

Fue fundado en 1892 como paraje del kilómetro 25,500 del ramal Cañuelas- Las Flores del ex Ferrocarril del Sud, sin embargo, su historia se remonta al 1700. En aquel entonces, esta región estaba habitada por pueblos originarios y por decisión del Cabildo se creó la Guardia del Monte.

El nombre de la localidad se debe al ingeniero Samuel Abbott, quien se desempeñó durante muchos años como gerente del Ferrocarril del Sud. Por otro lado, los primeros pobladores fueron familias de buen pasar económico y algunos productores agrarios que encontraron en esas tierras un gran desarrollo comercial por la fertilidad de la zona.  

Descubrí la atractiva historia de Abbott. 

Como muchos pueblitos de Argentina, cuando este transporte culmino su viaje, entró en una decadencia que desencadeno la migración de muchos de sus vecinos. Actualmente, solamente tiene 600 habitantes y sus callecitas se destacan principalmente por su tranquilidad y seguridad. 

Gracias a estas últimas características, Abbott fue elegido por el reconocido cantante español Joan Manuel Serrat como su oasis de tranquilidad cada vez que viene a nuestro país para hacer giras o presentaciones. Además, se deleita con la frondosa arboleda, los pájaros, la lectura de libros al aire libre, pero sobre todo de la buena comida que se sirve en la zona. Dadas sus visitas reiteradas, los vecinos lo galardonaron con el título de "Huésped Ilustre" del pueblo. 

¿Qué hacer en Abbott? 

Al ser una localidad rural, sus atractivos son bien campestres y ofrecen al turista una experiencia diferente. Dentro del casco histórico se puede encontrar: su capilla "Santa Margarita de Cortona" que data 1924; el Abbott Tennis Club una construcción inglesa que es muy pintoresca dentro del ambiente natural y el Museo del Ferrocarril que funciona en el propio predio de la estación. 

El turista no se puede ir de Abbott sin visitar las almacenes de ramos generales y la tradicional pulpería del pueblo llamada "La Carpintería". En este sitio se sirven las comidas más ricas de la región, incluyendo asados, pastas, y las picadas con fiambres de la zona. Además, se degustan vinos bien sabrosos. 

Por otro lado, a lo largo del pueblo, hay estancias, fincas y hoteles de campo que también son excelente opción sobre todo si tu deseo es descansar de la rutina y desconectar de la tecnología. Asimismo, se destaca que estos espacios ofrecen la posibilidad de hacer actividades rurales.