Por Juan Bernardo Domínguez.

El drama de acceder a una vivienda recrudece cada vez más en el Área Metropolitana de Buenos Aires ( AMBA). La oferta de propiedades en alquiler se redujo y los precios de renta subieron por encima de la inflación. Además, en muchos casos, se publican en dólares.

En la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, el 94% de los inmuebles ofrecidos son para venta y sólo 6% para arrendamiento. Asimismo, hubo una caída del 30% en la disponibilidad de departamentos de uno y dos ambientes en el último año.

Esos datos, surgidos de un relevamiento de Mercado Libre y de la Universidad de San Andrés (UdeSA), ya habían marcado el cuadro acuciante que atraviesan las personas necesitadas de viviendas permanentes. Se trata de un mercado que, así como está planteado, sólo resulta amigable a los turistas con dólares que buscan alquileres temporarios.

Ahora, una nueva encuesta, realizada en 1.508 hogares, reveló que las penurias son mayores aún. El 63% de los inquilinos del AMBA se endeuda para pagar el alquiler. Así lo detectó un estudio realizado por el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS); la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ); el Instituto de Geografía de la Universidad de Buenos Aires (UBA); el Centro de Estudios Urbanos y Regionales (CEUR-CONICET); la Escuela Interdisciplinaria de Altos Estudios (EIDAES); y el Instituto de Geografía de la UBA.

El relevamiento, al que accedió cronica.com.ar, fue realizado entre el 12 y el 26 de noviembre de 2022, pero su resultado fue difundido en las últimas horas.

Más datos preocupantes revelados por la encuesta

El estudio, además, arrojó otros datos preocupantes. Por ejemplo, el 38% de los encuestados que presenta problemas para obtener vivienda reside en Capital Federal. Y hay un 35% que lo hace en una habitación o convive con otra familia para no quedar en la calle. Además, sólo el 50% dijo tener un contrato firmado con el locador.

Infografía que refleja que sólo el 50% de los inquilinos del AMBA tiene un contrato firmado con el locador (Gentileza CELS).

Cómo imaginan su futuro próximo los inquilinos encuestados

Los encuestados también fueron preguntados sobre cómo imaginan su futuro próximo. El 47% respondió que seguirá los próximos seis meses en el mismo lugar, un 5% no quiere renovar, a un 14% le gustaría hacerlo pero no puede, el 17% deberá irse antes de que termine el acuerdo y un 17% no sabe qué hará.

La brecha de género fue otro foco del estudio

Los datos revelaron que los hogares sostenidos por mujeres padecen una situación financiera peor que los mantenidos por varones. Los domicilios con una jefa de familia están más atrasados tanto en el pago de los impuestos como en el resto de los gastos, como pueden ser la devolución de un préstamo y la paga del fiado de compras en comercios.

Los hogares femeninos tienen menor capacidad de ahorro y están más endeudados: el 55% contra el 46% de los sostenidos por varones.

¿Qué dicen los especialistas sobre esta apremiante situación?

El coordinador del equipo de Derechos Económicos, Sociales y Culturales del CELS, Leandro Vera, trabajó en el relevamiento. “Nosotros producimos información sobre los inquilinos ante la inexistencia de datos estatales; el Estado no produce información específica al respecto”, sostuvo Vera este martes en diálogo con cronica.com.ar.

“Lo que observamos es que, para poder sostener el pago del alquiler, los inquilinos se endeudan tanto en el ámbito formal, como con bancos o solicitando adelanto de sueldos; como en el ámbito más doméstico, pidiendo a familiares o fiado en comercios”, precisó.

Por último, Vera manifestó: “La principal reflexión sobre esto es que los Estados, de las distintas jurisdicciones, deben tomar el alquiler como una dimensión urgente para dirigir políticas públicas”.

Por su parte, el presidente de la Unión Argentina de Inquilinos (UAI), Ricardo Botana, dijo que los datos del estudio no lo sorprenden. “Ahora estamos hablando que el famoso aumento anual del Índice para Contratos de Locación (ICL) está arrojando un 100% y todo indica que eso no va a parar: va a seguir subiendo”, alertó este martes en conversación con cronica.com.ar.

Entonces, nos encontramos con inquilinos que, de un día para el otro, tienen que pagar el doble. Eso descompagina, complica mucho la economía de un inquilino que tiene que esperar mínimamente cuatro o cinco meses para que le suba su salario”, ejemplificó.

El presidente de la UAI, por último, confirmó que cada vez es más notorio que los inquilinos buscan compartir una vivienda, por ejemplo, ocupando sólo una habitación. “Son todas alternativas que se necesitan por la escasa cantidad de propiedades para vivienda permanente y la escalada inflacionaria”, finalizó.