"Gordofobia": la estigmatización se intensificó con la pandemia de coronavirus
La falta de información hizo que el discurso discriminatorio sobre esta enfermedad se multiplique en otros espacios, además del digital.
La estigmatización de las personas que sufren de sobrepeso y obesidad se intensificó durante la pandemia. El contenido gordofóbico en redes sociales, donde se repiten las publicaciones aspiracionales de cuerpos hegemónicos, tiene un impacto cada vez mayor en quienes lo padecen. La confusión generalizada que existe alrededor de estas patologías termina afectando al individuo y entorpeciendo su tratamiento.
Es importante comprender que la obesidad y el sobrepeso no se explican como una falta de voluntad o de deseo de estar más sano o saludable. Se trata de una enfermedad multifactorial, dado que la persona está afectada por distintos factores como: genéticos, medio ambientales, conductuales, hormonales y emocionales asociados o no a la autoestima, entre otros.
"Es un paciente que viene durante muchos años con fracasos de tratamientos. Tiene una ´mochila´ y una autoflagelación que lo hace pensar que es el responsable de tener esta enfermedad. A una persona con diabetes a nadie se le ocurriría de culparla por de tener esa enfermedad. Se trata una patología que es multifactorial, crónica y de muy difícil tratamiento; con lo cual hablar de que el paciente es el responsable absoluto es un error enorme y lo estigmatiza", señaló el Dr. Pedro Martinez Duartez, presidente de SACO (Sociedad Argentina de Cirugía de la obesidad y enfermedades relacionada al exceso de peso).
Uno de los conceptos errados en referencia a esta enfermedad es que la gente cree que con una dieta y haciendo ejercicio el paciente obeso va a bajar de peso, sin embargo, no es tan sencillo.
Es que si bien hay una relación con la comida que no es sana, la persona que la sufre tiene un metabolismo más lento en el que si consume una cierta cantidad de calorías, que puede ser igual a la de una persona delgada, sigue aumentando de peso.
La falta de información al respecto hace que el discurso "gordofóbico" se multiplique en otros espacios, además del digital. "Hay un estigma real acerca de la obesidad en los colegios, en las empresas, en el área de salud, en los medios de comunicación y en la sociedad en sí. Es un paradigma que tenemos que ir modificando y luchando para hacer entender que la obesidad es una enfermedad que deteriora la calidad de vida, la expectativa a largo plazo y que fomenta una muerte temprana", mencionó Martinez Duartez.
Al tratarse de una enfermedad crónica, el paciente con obesidad necesita realizar un tratamiento de por vida que no depende solamente de realizar ejercicios y hacer una dieta. Según el especialista, para alcanzar y mantener un peso saludable el individuo debe estar acompañado por "un equipo terapéutico que incluya: nutricionistas, psicólogos, médicos clínicos y endocrinólogos, entre otros; todos trabajando de forma interdisciplinaria para lograr el mejor resultado" a largo plazo.
Plan a largo plazo:
Uno de los tratamientos contra la obesidad con más efectividad de acuerdo al especialista es la cirugía bariátrica, aunque no todos los pacientes logran acceder a esta intervención.
“Actualmente, la terapéutica más eficiente- demostrada científicamente- es la cirugía bariátrica. Solo el 1% de los que tienen la indicación están utilizándola y eso quiere decir que hay algo que está fallando”, señaló el Dr. Pedro Martínez Duartez.
A pesar de los buenos resultados que promete, se comete el error de considerarla una una solución sencilla. “La cirugía es una herramienta, pero depende de un equipo interdisciplinario para que esta sea exitosa. Esto implica hacer cambios en la alimentación y adecuar la actividad física” finaliza Martínez Duartez.