El pibe de 17 años que el 19 de noviembre aplicó una trompada feroz a un playero de un estacionamiento comercial porteño porque encontró un rayón en su auto se presentó este jueves ante la Justicia, que dispuso la intervención de un fiscal del fuero penal juvenil capitalino, mientras que su defensor aseguró este viernes que el acusado tuvo una “reacción instintiva” producto de una "agresión" previa de la víctima.

El imputado, junto a su abogado, se apersonó al fiscal Penal, Contravencional y de Faltas 12, Sebastián Fedullo, que llevaba adelante la causa y que, al corroborar que se trataba de un menor de edad, giró el expediente a su colega Mauro Tereszko, de la Fiscalía Penal Juvenil del mismo Ministerio Público Fiscal de la ciudad.

El fiscal Tereszko, por su parte, esperó un nuevo parte médico sobre el estado de salud de la víctima, Arturo López, de 66 años, con el fin de definir la imputación para indagar al acusado.

En tanto, el abogado José Pereyra, defensor del pibe, confirmó este viernes por la mañana que el jueves se presentó con su cliente ante la Fiscalía porteña para "estar a derecho" y explicó que el muchacho no quedó detenido, sino que el joven "está en su casa, contenido por su familia".

"Estamos esperando cómo es la evolución del señor que está lesionado para ver la Fiscalía qué temperamento adopta y cuál es la imputación que le notifica a mi cliente”, comentó en diálogo con el canal C5N .

Pero este mediodía, el fiscal recibió el nuevo parte médico, decidió imputar por lesiones graves al joven de 17 años y pidió su detención a la magistrada Carla Cavallieri, informaron fuentes consultadas por Infobae.com.


Por su parte, el abogado defensor en la mañana de este vierne trató de explicar lo sucedido en el estacionamiento comercial. El letrado indicó que “hubo una discusión" que empezó  "40 minutos antes” de los videos del momento de la trompada, que se viralizaron.

Pereyra agregó que el hombre de 66 años "habría tenido alguna respuesta agresiva con la madre" de su defendido, quien lo acompañaba, y que "eso provocó una reacción instintiva" del adolescente, cuando le aplicó la piña en la cara al playero y lo desmayó.

El hecho ocurrió el viernes último, alredeodr de las 19, en la playa de un estacionamiento ubicado en la calle Moreno al 800, del barrio porteño de Monserrat.

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