El padre Grassi pidió la libertad condicional por cumplir más de la mitad de condena
La defensa del eclesiástico solicitó el beneficio ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Morón. En respuesta, el abogado querellante de la causa consideró que la posibilidad de que salga sería un "escándalo internacional" por el caso que "marcó un antes y un después en la lucha contra la pedofilia".
Tras haber cumplido en prisión más de la mitad de condena por caso de abuso de menores, el padre Julio César Grassi (67) pidió este martes la libertad condicional, mientras que el abogado denunciante manifestó públicamente que se "opondrá" a dicho pedido ya que significa "otro fuerte golpe para las víctimas".
Tras la solicitud del abogado defensor del eclesiástico ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Morón, el jurista querellante y representante del Comité de Seguimiento y Aplicación de la Convención Internacional sobre los Derechos del Niño en Argentina (Casacidn), Juan Pablo Gallego, manifestó su "rotunda oposición al beneficio que pretende Grassi".
En declaraciones al medio Télam, Gallego opinó que el hecho de no cumplir con la condena estipulada significa "otro fuerte golpe para las víctimas", y que tal oposición será puesto en "manifiesto al Tribunal".
El jurista, que participó a fondo en la investigación del sacerdote, dijo que su hipotética liberación significaría "opacar el acto de justicia que implicó validar la verdad de las víctimas", a la vez que se transformaría en un "escándalo internacional" por el caso que "marcó un antes y un después en la lucha contra la pedofilia en el ámbito eclesiástico".
Vale destacar que Grassi fue condenado por el mismo Tribunal el pasado 10 de junio de 2009, a la pena de quince años de prisión por los delitos de abuso sexual agravado por resultar sacerdote, encargado de la educación y de la guarda del menor víctima, cometidos en noviembre y de diciembre de 1996 en la Fundación Felices los Niños de Hurlingham.
La condena al sacerdote, que en principio regía hasta el 7 de agosto del 2026, fue extendida dos años tras una apelación presentada por la querella, a raíz del mal cálculo de la pena y la inaplicabilidad del beneficio llamado "dos por uno".
Tal es así que la sentencia inicial de Grassi fue apelada ante la Cámara de Apelaciones de Morón, que dio lugar a la petición y ordenó extender la condena hasta el 30 de mayo del 2028.
"El tribunal que lo condenó trazó la pena e incluyó fechas erradas al contabilizar días en los cuales estuvo en libertad. Por ejemplo, la del 23 de octubre de 2002, ese día, Grassi se escapó de un canal de televisión en el baúl de un vehículo. Sin embargo, ese día estaba computado como vivido en prisión", resaltó Gallego en una entrevista.