Pasaron 13 días desde que Betiana Solange Rossi, madre de tres adolescentes, fue vista por última vez. La mujer de 38 años salió de su casa  el pasado 7 de febrero del barrio porteño de Villa Real y todavía no aparece.

El último jueves, la Policía encontró la riñonera que llevaba cuando fue captada por las cámaras de seguridad de un supermercado de la localidad de Tres de Febrero. En su interior había un celular, el DNI de la mujer, dos tarjetas SUBE y una botella de alcohol en gel.

Martín Rossi, hermano de la mujer, reafirmó en las últimas horas que ella había tenido una discusión con su pareja por un tema económico, pero reiteró que no cree que ese haya sido "el detonante" de la larga ausencia.

"No descartamos que se haya enojado y se haya ido caminando y en el transcurso la hayan secuestrado", dijo.

El hermano indicó a la prensa que después de esa discusión "Nicolás (pareja de Betiana) vino a contarnos que se había ido" y añadió que "uno se puede enojar y empezar a caminar pero de ninguna manera ausentarse de su hogar y de su familia durante tanto tiempo".

Además, contó que una vez hallado el celular de Betiana en un descampado fueron "a la fiscalía a aportar posibles claves que hubiera usado" y reiteró que desconocía "si es por una deuda que se haya ausentado diez días de su hogar, dejando a una familia desconcertada".

Betiana Rossi, de 38 años, está desaparecida desde el 7 de febrero.

"Mis padres sufren y sus hijos la extrañan y necesitan", señaló. Y agregó que la familia no descarta ninguna hipótesis acerca de si la riñonera encontrada "fue plantada allí o tirada".

"La pareja nos acompaña en los rastrillajes y no se si la zona en la que hallaron sus documentos es frecuentada por ella. Ojalá fuera una cuestión psicólógica la causa de su desaparición así podemos descartar el secuestro", dijo Martín, quien estimó que las llaves encontradas en la riñonera "eran de la moto de la pareja".