Por Fernando Vázquez
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Gracias a un operativo que se realizó en la localidad bonaerense de Dock Sud, en el partido de Avellaneda, un ciudadano uruguayo, de 34 años, vinculado a las barrabravas de Boca y de Peñarol de Montevideo, fue detenido por los efectivos policiales al estar sindicado como un peligroso sicario de la mafia china. El individuo era buscado a raíz de diversos ilícitos ocurridos en Vicente López, San Fernando, Munro y Virreyes.

Los voceros del departamento judicial de San Isidro revelaron a cronica.com.ar que el sujeto, llamado Roberto, de 34 años, fue apresado por los integrantes de la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I.) de Avellaneda-Lanús, como saldo de un allanamiento que se concretó en una finca situada en General Levalle al 1300, en jurisdicción de Dock Sud.

De acuerdo a lo manifestado por los informantes, al revisar el inmueble, los servidores públicos incautaron un aparato de telefonía celular y un Peugeot 206 gris, dominio JEB 051, que se cree que era utilizado por el acusado para la consumación de estos ilícitos.

Trascendió que el imputado, que era miembro de las barrabravas de Boca y de Peñarol, se desempeñaba como sicario de esta mafia oriental, que lo utilizaba a fin de que concretar extorsiones y para amedrentar a los dueños de distintos supermercados, manejados por comerciantes pertenecientes a la colectividad china.

Como saldo de una serie de tareas investigativas, los policías comprobaron que el individuo trabajaba para un grupo de mafiosos chinos liderados por Chin Sheng Chen, de 82 años y apodado El Viejo Qiu; Shumei Yao, de 50; y una mujer de nombre Dongxiang Qiu, de 45, quienes ya se encontraban detenidos.

En tal sentido, se logró establecer que el sospechoso había actuado en los siguientes actos intimidatorios durante este año: el 21 de enero pasado, en el supermercado Luna, ubicado en el cruce de Belgrano y Vélez Sarsfield, en Munro; el 24 de enero en el comercio denominado Angela, en Brandsen al 100, en San Fernando; el 19 de febrero en el local de razón social Fanny, instalado en Avellaneda al 3400, en Virreyes; y el 26 de febrero en el negocio llamado Lavalle, situado en Lavalle al 3900, en Vicente López.

Al respecto, se estableció que en los tres primeros casos el individuo agregió a balazos a los comerciantes, mientras que en el cuarto episodio le dejó una nota extorsiva al dueño, exigiéndole que pagara 30.000 dólares.

Autoridades de la Superintendencia General de Investigaciones en Función Judicial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires se encargaron de supervisar los diferentes procedimientos.

Intervino en las causas el doctor Alejandro Musso, fiscal del Area Ejecutiva de Investigaciones Criminales de San Fernando, dependiente de los tribunales de San Isidro.