Con la digitalización empujada por la pandemia del coronavirus, muchos de nuestros datos hoy en día se encuentran en la red. Desde trabajo y ocio hasta cuestiones más personales y de índole financiera, todo es objeto de la creciente ola de cibercrímenes que asechan a los más vulnerables. Mientras es común escuchar de los más grandes cayendo por estafas en internet, esta abuela rusa desafió el estereotipo y se llevó a casa un premio.

La mujer de 70 años, ciudadana de Cheliábinsk, recibió un llamado de un hombre quien dijo ser representante de su banco. Los estafadores informaron a la profesora de lenguas extranjeras que alguien estaba intentando robar el dinero de su cuenta, y le preguntaron cuánto tenía guardado en el banco.

Habiendo recibido llamadas similares en otras dos ocasiones, ella reconoció el intento de phishing. En vez de colgar, sin embargo, la anciana decidió seguirles el juego y les informó a los estafadores que guardaba 8 millones de rublos en su cuent -10 millones de pesos-. En verdad, la mujer sólo tenia unos 50 rublos a su nombre, equivalente a 65 pesos.

"Dije la primera cantidad que se me ocurrió: 8 millones. No sé por qué esa cantidad", explicó a medios locales la mujer, cuya identidad permanece anónima. "Entonces la persona con la que hablaba empezó a apresurarse a decir que cada segundo era valioso, y me sugirió que fuera al banco, retirara todo el dinero y lo transfiriera a una cuenta segura. Además, pidió que no colgara para seguir en contacto", agregó.

Las estafas telefónicas estuvieron en alza durante la pandemia del Covid.

Buscando retorcer los planes de los cibercriminales, la jubilada comentó que las llamadas entrantes a su teléfono eran de pago, y que no sabría cuánto tiempo alcanzaría su actual saldo. Sin parar a preguntarse por qué una millonaria estaba corta de saldo telefónico, los estafadores rápidamente le ofrecieron una recarga: "Casi inmediatamente me transfirieron 500 rublos. Al parecer, me iban a tener enganchada durante mucho tiempo", comentó la mujer.

Cuando el "empleado" volvió a llamarla para insistir que se acercara a un cajero automático, ella le preguntó que banco representaba. "Cuando lo nombró, me hice la esclerótica y le dije que los 8 millones estaban en otra organización, y que solo tenía 50 rublos en su banco", dijo. Tras un corto silencio del otro lado de la línea, la anciana escuchó una sarta de grocerías antes de que el ladrón cortara la llamada.

Qué es el phishing y cómo prevenirlo

La estafa se volvió un método popular de cibercrimen durante el aislamiento.

Con el método de phishing, los cibercriminales engañan a las personas para robar información personal. Pretendiendo ser gente de confianza, empresas o instituciones, los estafadores convencen a las víctimas de entregar voluntariamente contraseñas, datos bancarios y mucho más.

Mientras prevalece el pishing por correo electrónico, llamadas y textos también son utilizados. La Defensoría del Pueblo bonaerense detectó solo en la provincia un 200% de aumento en denuncias por estafas virtuales en lo que va del 2021. "Se vio un notorio aumento desde el inicio del ASPO, donde las actividades en línea aumentaron significativamente y con ello sus respectivas amenazas y riesgos", explicó Arturo Pozzali, defensor adjunto y defensor del Cliente Bancario.

La defensoría porteña generó un simple manual de prevención contra el phishing disponible acá, donde listan medidas de precaución como evitar links sospechosos, tener cuidado con la descarga de archivos y corroborar que los dominios sean auténticos (buscar faltas de ortografía o reemplazo de minúsculas por mayúsculas).