Historias del crimen: ¿Quién fue Felipe Espinosa, "el primer asesino serial" de México?
En plena guerra que mantuvieron México y Estados Unidos en el siglo XIX, apareció un personaje aterrador que dejó una huella en las crónicas policiales de la nación azteca.
La historia nos enseñó que si bien gran parte de los asesinos seriales que la atravesaron fueron tristes protagonistas por sus crímenes, no siempre estos se debieron a cuestiones sexuales o de infancias sufridas, sino que también existieron otros que lo hicieron por cuestiones "territoriales" o algo por el estilo.
Uno de estos casos fue el del criminal mexicano Felipe Nerio Espinosa Chávez, quien es considerado por los historiadores locales como el "primer asesino serial" de aquella nación, aunque el móvil de los hechos apunta a episodios particulares.
Todo se remonta a los primeros años de 1820 en la zona norte de México, donde se produjo la colonización americana que se potenció una década más tarde, por lo cual los estadounidenses fueron ganando terreno mexicano a pasos agigantados.
En ese plano geopolítico nació Espinosa en 1836 en la región de Condado de Río Arriba, que en aquel momento era territorio "azteca" y hoy pertenece a Estados Unidos (estado de Nuevo México), situación que enfrentó en conflictos por largos años.
Felipe Espinosa: infancia dura
Junto a sus padres (Pedro Ignacio Espinosa y Gertrudis Chávez) y hermanos atravesó una dura infancia en la que sobresalió la pobreza, marginación y segregación, algo que se potenció con el asunto político.
Tras años de guerras frente a Estados Unidos (finalizó en 1848), la furia se apoderó de Espinosa y comenzaron las muertes, es que en ese momento, los estadounidenses atacaron su casa y 6 miembros de su familia murieron por el episodio (entre ellas su mujer y su hija), aunque hay dos versiones desencontradas. Una es que la Marina de Estados Unidos bombardeó la vivienda de manera accidental y la otra, es que un grupo paramilitar ingresó al lugar, violó y mató a las mujeres presentes.
Sea lo que fuere, esto despertó el odio de Espinosa hacia los visitantes que se vería reflejado con el paso del tiempo. En tanto, la primera víctima de la que se tiene registro fue hallada en 1863, la cual fue descuartizada y se le sacó el corazón. A dos días de ese hecho, otro hombre fue encontrado muerto y en escasos meses, la cifra sufrió a 26 personas, entre hombres y mujeres.
El asunto es que se supo luego que Espinosa actuaba en complicidad con su hermano José Vicente, y el modus operandi era el siguiente: mataba con un arma de fuego, descuartizaba y evisceraba a los muertos, a los cuales dejaba a la vista para llamar la atención. Las muertes parecían dejar el sello de la venganza, ya que todas las víctimas fueron estadounidenses, y además, antes de que estos números se acrecienten, el asesino le escribió al gobernador de Nuevo México, John Evans, a quien amenazó con "matar a 100 gringos, 100 por cada uno de sus familiares", es decir, que su objetivo era alcanzar las 600 muertes.
En tanto, en una segunda carta le pidió inmunidad para él y su familia, pedido de perdón público y una indemnización de varios kilómetros cuadrados, a cambio de "no matar a 500 estadounidenses más". Esta situación indignó al funcionario, quien pidió a las autoridades militares salir a encontrar a Espinosa, pero ante la negativa de estos, apareció en escena Tom Tobin (quien se negó a ser ayudado por efectivos del ejército), una especie de cazarrecompensas, que al recibir una suculenta suma de dinero salió en búsqueda de Espinosa y su hermano.
Junto a tres hombres, Tobin logró encontrar el campamento de los Espinosa, situación que nadie había podido lograr hasta ese momento, y mantuvieron un feroz tiroteo que terminó con la vida de los hermanos fugitivos. Como muestra de su éxito, el cazador llevó los cuerpos de los Espinosa a las autoridades, quienes decidieron cortar la cabeza y manos de ambos y enviarlas a Fort Garland, donde el gobernador se convenció de los decesos.
Hasta la fecha se desconoce el destino de los cuerpos de ambos sujetos, quienes en un verano le quitaron a la vida a 32 estadounidenses y quedaron en la historia negra de su país por estos crímenes.
POR G.A.