¡Hallaron el juguete sexual más viejo del mundo en Inglaterra!
Un grupo de científicos del Reino Unido descubrió un particular objeto en un fuerte romano que podría ser el juguete sexual más antiguo de la historia. ¡Mirá!
Todos los 14 de febrero se celebra San Valentín o el Día de los Enamorados, una ocasión más que especial para pensar en un regalo diferente como puede ser un ramo de flores, unos bombones, joyas, o por qué no un juguete sexual para disfrutar con quien uno quiera.
Volviendo a la antigua Gran Bretaña, los habitantes de ese momento no conocían esta popular celebración, pero sí ya pensaban en el placer sexual. Esto lo demostró un grupo de científicos de Inglaterra que encontró un juguete sexual, que se cree que es el más viejo de la zona, y uno de los más antiguos del mundo.
Por más que los juguetes sexuales generalmente se consideran dispositivos modernos, un nuevo estudio sugiere que pueden remontarse mucho más atrás de lo que pensábamos. Los investigadores encontraron este extraño objeto de madera en el fuerte romano de Vindolanda que creen que pudo haber sido utilizado durante el sexo.
El artefacto se encontró junto con docenas de zapatos y accesorios de vestir, lo que significaba que inicialmente se pensó que era una herramienta para zurcir. Sin embargo, un nuevo análisis sugiere que el objeto de tamaño natural, que mide 16 centímetros de largo, en realidad se usó como un instrumento sexual.
"El objeto es un juguete sexual, creemos que podría ser el ejemplo más antiguo de Gran Bretaña", dijo Rob Collins, uno de los autores del estudio.
El objeto de madera fue descubierto en 1992 en Vindolanda, un fuerte romano al sur del Muro de Adriano, en el norte de Inglaterra, donde los soldados vigilaban el camino desde el río Tyne hasta Solway Firth.
Se encontró junto con una variedad de otros artefactos, incluidos zapatos, accesorios de vestir, herramientas pequeñas y productos de desecho artesanales, como cortes de cuero y astas.
Sin embargo, en su nuevo estudio, los expertos de la Universidad de Newcastle y el University College Dublin cuestionaron si este era el caso, dada la naturaleza fálica del objeto.