Decenas de miles de personas fueron este lunes a la Basílica de San Pedro para homenajear y despedir al papa emérito Benedicto XVI, cuyo cuerpo fue velado sin ninguna parafernalia papal antes de su funeral esta semana.

Benedicto XVI falleció el pasado sábado 31 de diciembre a los 95 años, en el aislado monasterio vaticano en el que vivía desde su inesperada renuncia en 2013.

A primera hora de la mañana de este lunes el cuerpo de Benedicto XVI fue trasladado del Monasterio Mater Ecclesiae a la Basílica de San Pedro.

Miles de fieles hacen fila dentro y fuera de la Basílica de San Pedro del Vaticano para despedirse del papa emérito. Los restos de Joseph Ratzinger estarán expuestos al público hasta el funeral previsto para este jueves.

La seguridad de la capital italiana se ha reforzado con motivo de la capilla ardiente y el funeral del pontífice emérito Benedicto XVI, con la presencia de más de mil agentes de las fuerzas del orden y el cierre del espacio aéreo en la plaza de San Pedro.

Aún existe cierta incertidumbre sobre el protocolo que seguirá El Vaticano tras la muerte de Benedicto XVI ya que no existe un estatuto sobre el fallecimiento de un papa emérito.

Miles de personas fueron este lunes a la Basílica de San Pedro para homenajear y despedir al papa emérito Benedicto XVI.

Por ahora solo se sabe que el funeral oficiado por el papa Francisco será solemne, pero también sobrio para respetar la voluntad de Ratzinger.

Por primera vez en la historia de la Iglesia católica, el papa reinante presidirá el funeral de otro papa. Joseph Ratzinger sustituyó en 2005 a Juan Pablo II y renunció en 2013.

El Vaticano confirmó que sus restos descansarán en la cripta de los papas, cerca de la tumba de San Pedro.

Se calcula que en cada jornada, hasta las 19H00 hora local del miércoles próximo, al menos 35 mil personas puedan dar su adiós próximo a Benedicto XVI, quien murió en la mañana del 31 de diciembre de 2022 en su residencia del monasterio Mater Ecclesiae, ubicado en los jardines vaticanos.

"Siento como si fuera un abuelo para nosotros", dijo a Reuters en la Plaza de San Pedro Veronica Siegal, una estudiante católica de secundaria de 16 años de Baton Rouge, Luisiana, que está en Roma para un programa de estudios religiosos, después de ver el cuerpo.