A 15 días del traspaso de Gobierno y de que el presidente electo Joe Biden cumpla su promesa e imponga el uso obligatorio de tapabocas, las cifras epidemiológicas de Estados Unidos siguieron empeorando y este martes el país registró un nuevo récord de muertes diarias con 3.930 fallecidos.

La Universidad Johns Hopkins no solo registró este récord, sino que informó que el país, el más golpeado del mundo por la pandemia, superó durante la jornada del martes los 21 millones de contagios, mientras los muertos también son superiores a 357.000.

Solo en las últimas 24 horas, Estados Unidos sumó más de 250.000 contagios, lo que demuestra que la curva sigue creciendo sin control a nivel nacional, luego de un año en el que el número de casos nunca bajó por debajo de los 20.000 diarios, en la meseta más baja que vivió la potencia tras el primer pico en Nueva York en abril pasado.

Pese a ello, el presidente saliente Donald Trump nunca quiso tomar medidas preventivas y restrictivas a nivel nacional, y apostó todo a la rápida aprobación y distribución de millones de dosis de vacunas, una campaña que recién comenzó hace unas semanas.