El papa Francisco se reunió con los principales empresarios italianos por la crisis energética: ¿Qué les pidió?
El Sumo Pontifice manifestó su preocupación por la situación delicada que atravieza Italia a raíz de la suba de los precios de gas y electricidad por la guerra en Ucrania e hizo un pedido especial.
El papa Francisco recibió este miércoles al lider de los empresarios italianos y presidente de Confindustria Carlo Bonomi, junto a los representantes de las principales empresas del país, en el marco de una crisis energética sin precedentes en Europa ante la suba desmesurada de los precios del gas y la electricidad.
El Sumo Pontifice manifestó su preocupación por el panorama delicado, que pone en riesgo la continuidad de la producción de las industrias italianas y del prestigioso “Made in Italy” y habría pedido reducir la brecha salarial y crear puestos de trabajo para jóvenes e inmigrantes.
El encuentro se realizó en la Sala Nervi del Vaticano y contó con la presencia de más de cuatro mil industriales que participaron junto a sus familias en la audiencia especial que el Santo Padre dedicó a la principal organización representativa de las empresas manufactureras y de servicios italianas.
Durante la cumbre, solicitó “mayor compromiso por parte de las empresas para ofrecer trabajo digno", en este momento sin precedentes a causa de la crisis energética de Europa que se profundiza a medida que Rusia limita aún más las exportaciones de gas natura hacia Europa.
Esta limitación obliga a los gobiernos a implementar planes extraordinarios y sin antecedentes para proteger a muchas empresas que se encuentran al borde del cierre y a los consumidores que recibieron facturas exorbitantes a medida que la región se desliza hacia la recesión.
En un momento tan delicado y de sensibilidad social que obliga al viejo continente a entrar en un periodo de austeridad, el tema salarial estuvo en el centro del claro mensaje que el Santo Padre dirigió a los industriales.
“Crear puestos de trabajo”, dijo el Papa, “genera una cierta igualdad en sus empresas y en la sociedad”. En esa línea afirmó que “es cierto que hay una jerarquía en las empresas, es cierto que hay diferentes funciones y salarios, pero los salarios no deben ser demasiado diferentes”.
"Hoy, la parte del valor que se destina al trabajo es demasiado pequeña, especialmente si la comparamos con la que se destina a los ingresos financieros y los salarios de los altos directivos", consideró.
A pocos días de las próximas elecciones en Italia y haciendo un balance de la situación del país, Bonomi explicó al Pontífice: "Hoy, lo que nos causa gran preocupación no son sólo los efectos de la espantosa guerra en Ucrania, los costos de la energía y el persistente bajo empleo en nuestro país, sino la ola de desconcierto, desconfianza y sufrimiento social que expresan una parte demasiado grande de la sociedad italiana".
El papa Francisco reconoció por su parte que “este momento no es fácil, para ustedes y para todos. El mundo empresarial también está sufriendo mucho. La pandemia ha puesto mucha presión sobre tantas actividades productivas, todo el sistema económico se ha visto afectado. heridos y ahora la guerra en Ucrania se ha agregado a la crisis energética resultante".
“También sufre en estas crisis el buen empresario -subrayó el Pontífice-, que tiene la responsabilidad de su empresa, de su trabajo, y que siente incertidumbres y riesgos sobre sí mismo”, estimó.
Según Francisco, "en el mercado hay empresarios 'mercenarios' y empresarios semejantes al buen pastor que sufren los mismos sufrimientos que sus trabajadores”.
Por último, el Sumo Pontífice pidió al sector industrial pagar los impuestos y explicó que "los impuestos son también una forma de compartir la riqueza, para que se vuelva un bien común, como los servicios públicos escuelas, salud, derechos, ciencia, cultura, como dice la Constitución italiana".