Cuál es la postura de FIFA y Qatar frente a la ejecución del futbolista condenado a muerte en Irán
Nasr-Azadani fue acusado y sentenciado por manifestar su reclamo público en defensa de los derechos de las mujeres. Una solicitud de Change.org que busca frenar la medida ya cuenta con cerca de 500.000 firmas.
La FIFA y Qatar podrían coordinar esfuerzos y evitar la ejecución de Amir Nasr-Azadani, el jugador condenado a muerte por el régimen de los Ayatollahs, acusado de una presunta “enemistad con Dios”, luego de manifestar su reclamo público en defensa de los derechos de las mujeres de Irán. Sin embargo, se presume que por el momento no intervendrán.
Es decir, que por ahora el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, y el jeque de Qatar, emir Tamim bin Hamad Al Thani, no harán nada para que Nasr-Azadani no continúe la zaga de Mohsen Shekari y Majid Reza Rahnavard, las dos víctimas del fundamentalismo iraní que pagaron con su vida por protestar por la ejecución de Mahsa Amini, que cayó en manos de la Policía de la Moral por no tener bien puesto el velo islámico.
Es que la FIFA organizó el mundial con Qatar, que tiene una alianza geopolítica con Irán y jamás complicaría sus relaciones con Teherán, por las relaciones económicas que mantienen Doha y Teherán. Además de la alianza regional.
En ese contexto, desde Doha sostienen que la FIFA no tenía pensado solicitar formalmente que Irán anule la sentencia de muerte contra Nasr-Azadani, y menos aún conociendo los vínculos de poder entre el emir Al Thani y el régimen de los Ayatollahs.
Según infomó IranWire, Amir Nasr-Azadani, está acusado del delito de “traición a la Patria”, lo que se castiga con la muerte. El medio, también, indicó que la familia del futbolista “fue amenazada repetidamente por las fuerzas de seguridad de la República Islámica” si contaban que el jugador estaba detenido, algo que finalmente trascendió.
Lo más grave de todo esto es que solo uno de sus compañeros en la Selección de Irán se pronunció sobre el hecho en sus redes sociales. El arquero Alireza Beiranvand, pidió que las penas fuesen revocadas.
No obstante, mientras la FIFA opta por el silencio, la Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFBRO) hace público su reclamo a través de las redes sociales y exige a Irán que levante la condena contra el futbolista que defiende los derechos humanos. “Nos solidarizamos con Amir y pedimos la eliminación inmediata de su castigo”, posteó FIFBRO en su cuenta de Twitter.
También, Amnistía Internacional repudió la medida: “La organización le pidió a la comunidad internacional que utilice todos los medios necesarios para presionar al gobierno iraní para que detenga las ejecuciones y la pena de muerte”, dijo su presidenta Diana Al-Tahavi.
Asimismo, una solicitud de Change.org que busca frenar la ejecución, ya cuenta con cerca de 500.000 firmas. Una movida pública que intenta penetrar la alianza entre la FIFA y Qatar que, en definitiva, facilita la sistemática violación a los derechos humanos que comete Irán.
El régimen fundamentalista no fijó fecha aún para colgar a Nasr-Azadani de una grúa apostada en las calles de Teherán, pero ese crimen ocurriría después de la final que disputarán Argentina y Francia en Doha. Irán considera que el jugador de futbol cometió la afrenta de iniciar una “guerra contra Dios”, aplicando una interpretación fundamentalista del Islam.