Compraron lo que creían era un perrito y lo criaron durante meses: el susto que se llevaron se volvió viral
Esta insólita situación tuvo lugar en Perú. Una madre de familia le dijo a su hijo que podían tener una mascota, a quien bautizaron "Run-Run". ¡Conocé esta historia!
No es la primera vez que alguien se lleva un sorpresa comprando una mascota “por izquierda”. En estos casos, los animalitos pueden no ser lo que uno desea. Este precisamente fue el caso de una familia en Perú, que intentó adoptar un Husky Siberiano pero terminó siendo un zorro.
Todo comenzó cuando Maribel Sotero le dijo a su hijo que podía comprar un cachorro en Sol Naciente y fueron a buscar un criador, quien les vendió lo que suponían, era este perrito por unos 52 soles peruanos (1.200 pesos argentinos). Por supuesto que todo siguió su curso, lo empezaron a criar con mucha dedicación y cariño, pero comenzaron a notar ciertas conductas que no se correspondían con un “pichicho”, a quien bautizaron como “Run-Run”.
Cuando comenzó a crecer su nivel de agresividad y notaron que su orina y heces tenían un olor mucho más contundente que el corriente, su padre se fijó bien y cayó en que estaban criando un zorro en lugar de un perro. Además, cazaba a las mascotas de los demás vecinos, como gallinas y conejillos de indias. “A veces, se come cuatro o cinco conejillos de indias y tengo que pagarlos”, explicó Sotero, quien también agregó que "Pensamos que era un cachorro de pura raza".
En adición, comentó que no se dieron cuenta en un principio porque compartía algunas conductas con los perros. "Dijeron que es un perro lobito, pero no sabíamos que era zorro. Come normal, como cualquier perro, pero cuando fue creciendo se fue notando que no era perro", comentó.
Sin embargo, aquí no termina esta historia, ya que este zorrito travieso de 8 meses escapó en una noche de tormenta, aunque tenga un tufillo cinematográfico efectivamente sucedió, y desde entonces se encuentra vagabundeando por el vecindario.
El Servicio Forestal y de Fauna de Silvestre de Perú (Serfor) se expresó al respectó y redactó en un comunicado ciertas pautas a tener en cuenta si uno se lo cruza. Llamaron a "a no perturbarlo a fin de lograr su captura (...) tampoco acorralarlo, porque al sentirse amenazado puede ser agresivo. De acuerdo con las fotografías se trata de un zorro andino (Lycalopex culpaeus), de aproximadamente ocho meses". Recientemente algunos vecinos afirman que lo vieron jugando con una perrita de la zona.
Recientemente el organismo intentó tranquilizarlo mediante un dardo, pero la puntería falló. “Al parecer fue disparado contra Run Run, pero tiene el líquido en el interior, no le ha caído (el dardo). Ellos están esperando que el zorro se quede quieto, porque si le disparan cuando está en movimiento, puede caer”, indicó un reportero de América Noticias.