Receta: prepará los chipá más crujientes y dorados para estas tardes de calor
Un aperitivo ideal para una ronda de mates con amigos en un día de verano, donde lo dulce no es precisamente el antojo. Aprendé los trucos para que queden bien crujientes, sabrosos, y brillantes como el oro.
Llegaron las altas temperaturas y la hora de la merienda ya no es tan pesada como antes. El dulce de leche y el chocolate quedaron un poco atrás, ya que con 30 grados el mundo dulce no es muy solicitado.
Al salir de la pileta, suele picar el hambre y el antojo tira más a un buen sandwich o medialunas con jamón y queso que una torta o un alfajor. Por ese motivo te traemos una opción salada ideal para la familia y amigos. Salen en abundancia, son crujientes y tienen de protagonista al queso: los famosos chipá.
Son las clásicas "bolas doradas" a la vista, que a kilómetros se les ve el queso impregnado. Recién salidos del horno tienen un olor que no olvidarás jamás. Pueden comerse calentitos o también fríos. Perfectos para acompañar con una bebida refrescante, o unos buenos mates.
Hay muchas formas de prepararlos, pero esta receta del "Gordo Cocina" es imperdible. Harán que te queden bien dorados, crujientes, sabrosos y esponjosos como una nube. Rinden en abundancia y comer uno es un camino de ida ¡No podrás parar! Son amigables a todos los paladares, tanto de niños como adolescentes y adultos.
No hay nadie que se resista a ellos. Aportarlos a una reunión social te convierten en la estrella de la velada. Segui la receta paso a paso y verás cuan accesible y fácil es llegar a estas exquisitas bolas de queso explosivas.
Ingredientes
- 1/2 taza de agua
- 1/2 taza de leche
- 1/4 de taza de aceite de maiz/girasol
- 1 cucharada de sal
- 1 taza de harina
- 1 taza de fécula de mandioca (se pueden sustituir por fécula de maicena)
- 1 huevo
- 150 gramos de queso rallado
Preparación
- Precalentar el horno a 180°.
- Poner a hervir el agua con la leche, la sal y el aceite. Apenas empiece a hervir apagás el fuego y añadis la fécula de una, se hace un engrudo tremendo pero vos seguí mezclando con una cuchara de madera.
- Dejar que se enfrie un toque (podés pasar la mezcla a un bowl si querés hacerlo más rápido) y le agregás el huevo. Se va a hacer un quilombo de nuevo, pero vos mezclá. (si el gordo te dice mezclá, mezclá)
- Añadir el queso, unis todo y untandote un poco de aceite en las manos, empezás a hacer las bolitas.
- Podés hacerlas más grandes para que sean tipo el “pao de queijo” brasilero o más chiquitas para los chipá clásicos.
- Los ponés en una fuente para horno, dejando espacio entre ellos porque crecen, y los horneás durante unos 20 o 25 minutos, o hasta que los veas bien dorados.
- Los dejás enfriar un toque (sí podés) y listo, a disfrutar.