Receta de churros caseros: solo con agua y harina podés preparar esta delicia
Aprendé a cocinar en casa este producto gastronómico tan aclamado por los argentinos. Son ideales para el fin de semana con unos ricos mates para toda la familia.
Los churros suelen ser los protagonistas de una tarde de playa en temporada de verano. A la hora de girar el mate son el primer antojo que surge y la docena en la arena es casi imprescindible ¿Pero porqué esperar a las vacaciones? O mismo, ¿Porqué ir a comprarlos a una panadería expresamente? Son un producto que según los expertos, son mejores caseros.
Además de ser una receta muy fácil de hacer, rinde de manera abundante y son ideales para aportar en una reunión social. No hay paladar argentino que se resista a un buen churro con dulce de leche. Son dúo dinamita tanto como las frutillas con crema, el limón y el merengue o el chocolate y la almendra.
Una rico café, unos mates o para los mas golosos, una taza de chocolate caliente acompañan a la perfección estos churros que le darán sabor al fin de semana. Preparalos para pasar la tarde, o sino, sorprende a tu familia en el desayuno y tendrán un despertar glorioso.
Esta receta de Directo al Paladar rinde para 24 unidades y tiene solo 5 pasos. Es importante tener cuidado al freírlos, ya que una quemadura de aceite no sería nada agradable. En el caso de usar manga pastelera, tener cuidado de que no queden grumos o bolsas de aire dentro de la masa, pues al echar los churros en el aceite podrían provocar la salpicadura. Con la churrera es más difícil que eso ocurra.
Ingredientes
- Agua 1 vaso
- Harina 1 vaso
- Sal una pizca
- Aceite para freír
- Azúcar
Preparación
- En un cazo, ponemos el agua al fuego con la sal. Cuando hierva, retiramos del fuego y vertemos la harina de golpe.
- Removemos enérgicamente hasta que la masa se separe de las paredes.
- Ponemos la masa en una manga pastelera con boquilla estriada o en una churrera y formamos los churros sobre la encimera.
- Calentamos el aceite y freímos los churros. Los iremos poniendo sobre un plato cubierto con papel de cocina, para que absorba el exceso de aceite.
- Rebozamos en azúcar y servimos enseguida.