Los blinis son una preparación gastronómica proveniente de Rusia y los países eslovenos que se cocinan en menos de 20 minutos, con pocos ingredientes, y que marida a la perfección tanto con lo dulce como con lo salado.

En varios países de Europa y el mundo se comenzaron a implementar como base de canapés estilosos debido a su pequeño tamaño, y su textura y consistencia ideal para este tipo de comida típica de eventos formales. De una sola mezcla pueden salir hasta 25 blinis pequeños, o por lo menos 10 tortitas grandes.

Blinis con salmón, una solución exquisita para salir de una urgencia.

Además de ser deliciosos ni bien se terminan de cocinar, también se puede conservar y hasta congelar por meses en el freezer. Para volverlos a comer, tan solo basta con descongelarlos, y cuando estén a temperatura ambiente, darles un golpe de calor en el horno o microondas.

Con respecto a las múltiples formas de acompañar o decorar estas masitas suaves y esponjosas, te dejaremos algunas ideas imperdibles para ir probando según el gusto y preferencia de tu paladar. 

Ingredientes

Para 25 tamaño mini o unos 10 tamaño tortita

  • 1 huevo.
  • 1 yogur natural de 125 gr (o azucarado si los quieres para acompañar a dulce, aunque es recomendable añadir yogur natural y después decidir qué echarles).
  • 1/2 sobre de levadura en polvo o polvos de hornear (8 gr).
  • La medida de un yogur, de harina (en peso son 75 gr de harina).
  • Un poquito de sal.
  • Aceite.

Procedimiento

  1. En el vaso de la batidora, mezclá el huevo, el yogur, la harina, los polvos de hornear y la pizca de sal.
  2. Bátelos durante un par de minutos. Te quedará una masa muy suelta pero con cierta cremosidad.
  3. En una sartén, añade un poquito de aceite (puede ser de semillas, ya que su sabor es más suave) y espárcelo con ayuda de un pincel de cocina o un poco de papel.
  4. Pon la sartén en el fuego, a media temperatura, y cuando esté caliente empieza a añadir chorritos de masa, con cuidado de que unos no se peguen con otros. La cantidad dependerá del tamaño que prefieras.
  5. Al cabo de un minuto, o cuando veas que se ha dorado un poquito, dales la vuelta y déjalos cocinar otro minuto más. Reserva.

Para acompañarlos:

Ideas dulces: podes añadirles chocolate fundido, crema pastelera, dulce de leche o mermeladas, frutas de estación, miel, etcétera.

Ideas saladas: con mayonesa y atún, con queso roquefort y pasas, con una salsita delicada o queso untable y salmón. Posibilidades hay muchas, ¡usa la imaginación!