Pizza a la parrilla: los mejores secretos para que salgan crujientes y deliciosas
Si estás pensando en variar el menú de tu juntada este fin de semana, mirá esta receta económica y con la que siempre quedás bien. ¡Aprendé el paso a paso!
Recién está comenzando enero pero si después de Papá Noel, fin de año y Reyes tu billetera está pidiendo descanso, una buena opción para compartir en la juntada familiar es la pizza a la parrilla. Además de ser económica, tiene un sabor especial ahumado que no lo conseguís con el horno y por supuesto, te permite adaptarla fácilmente para los invitados vegetarianos.
La masa tiene dos secretos, el primero es que no te tiene que quedar muy chirle por lo que es ideal utilizar una receta a base de levadura [ya sea en polvo o fresca] en vez de mucho aceite. El segundo es todavía más sencillo, dejarla descansar unos 15 minutos para que tome más cuerpo gracias a la levadura.
Paulina Cocina, la reina del Youtube culinario, tiene una receta infalible. Mezclar en un recipiente 25 gramos de levadura fresca [o una tercera parte si es en polvo], con media taza de agua tibia y una cucharada de azúcar y dejar levar por unos 10 minutos. En un bowl colocar medio kilo de harina 000, media cucharadita de sal, hacer una corona e incorporar la mezcla de la levadura. Unir con las manos agregando otra media taza de agua tibia y unas cuatro cucharaditas de aceite.
Una vez que está unida, dejarla descansar por 15 minutos. Cuando pase ese tiempo, dividir la masa en dos bollos del mismo tamaño y volver a amasar y estirarlas de la forma y grosor que se quiera la pizza. Dejarlas descansar otros 15 minutos antes de mandarla a la parrilla.
Receta de pizza a la parrilla
- Encender la parrilla ya sea a carbón o a leña con un fuego liviano a medio.
- Recostar la masa estirada a mano finita sobre la parrilla. Pasados unos 5 minutos, girar la masa para que se cocine del otro lado.
- Pintar con la salsa [puede ser simple salsa de tomate con sal y condimentos a gusto], agregar el queso y todo lo que se le quiera poner.
- Taparla con una pizzera [para asegurarte de que se derrita el queso] y dejar que se cocine unos cinco o seis minutos más.