Una nueva miniserie dramática de Brasil se estrenó esta semana en Netflix: está basada en una historia real y es una de las producciones que apuntan a posicionarse entre las más vistas de la plataforma en poco tiempo. 

Esta miniserie posee solamente cinco capítulos que rondan entre los 40 y 45 minutos, y está inspirada en el libro “Todo dia a mesma noite: A história não contada da boate Kiss”, que fue publicado en el año 2018 por la periodista brasileña Daniela Arbex.

“Todos los días la misma noche”, es la producción brasileña que cuenta la historia y la investigación sobre el incendio que se produjo el 27 de enero de 2013 en el boliche denominado Kiss, donde hubo 242 víctimas fatales luego que se desate un incendio en el lugar situado en la ciudad de Santa María.

Según la descripción de la historia en Netflix, “tras la muerte de 242 personas en un incendio en un club nocturno, lo único que pueden hacer los padres de las víctimas es llorar y luchar para que se haga justicia”. 

Netflix: todos los detalles de la historia de la tragedia en Brasil

La tragedia ocurrida en Brasil ocurrió en un boliche de aquel país, el cual contaba con una sola salida y era poca espaciosa. Durante la noche, se utilizaron bengalas en su interior, el material de revestimiento del lugar era inapropiado y también hubo un hacinamiento, ya que la capacidad máxima eran para 691 y los que estaban en el lugar eran aproximadamente 1300 personas.

La tragedia dejó un saldo de 242 personas muertas y 636 heridos. Por lo que es considerado el segundo incendio de Brasil con más víctimas, solo superado por la Tragedia del Gran Circo de América del Norte, sucedida en 1961 en Niteroi, donde fallecieron 503 personas.

El inicio de la fatídica noche se dio durante la presentación de la banda Gurizada Fandangueira, en la que hubo un show de pirotecnia y uno de los fuegos artificiales utilizados, que fue encendido por el vocalista del grupo, incendió el lugar tras impactar contra el material de aislamiento del tech.  

Los integrantes de la banda intentaron apagar el principio del incendio con agua y un matafuegos, pero en minutos se extendió por todo el lugar. Sin embargo, los guardias de seguridad cerraron las puertas para que nadie se fuera sin pagar, lo que produjo un amontonamiento en la zona de la salida, y que varios ingresen a los baños en el afán de encontrar las salidas de emergencia, que no tenía el lugar.