Cuando la tecnología 5G todavía no llegó a nuestras manos de manera concreta, ya aparecen en el horizonte tecnológico la 6G, que será el futuro de la distribución del servicio de internet, pero aún está en una etapa muy temprana de desarrollo.

Empresas y gobiernos de Corea del Sur, Japón, China y Estados Unidos están poniendo todo su esfuerzo en crear la sexta generación de tecnologías de la comunicación inalámbrica soportada por redes celulares.

La tecnología 6G, que llegaría entre 2028 y 2030, promete el ancho de banda, velocidad y reducción de latencia necesaria para garantizar la interacción entre las inteligencias artificiales generativas más poderosas, que exigen consultas directas en la nube, y los dispositivos de los usuarios finales: teléfonos y computadoras, pero también hogares inteligentes y gafas de realidad aumentada que necesitan fluidez máxima para experiencias inmersivas.

“En realidad, esto es lo que todo el mundo se pregunta. Principalmente, por supuesto, la alta velocidad de datos, la baja latencia y la conectividad, que de alguna manera son parte de 5G, serán mejoradas con la tecnología 6G”, relató Rakesh Tamrakar, el Standard Expert en 5G y 6G.

El futuro será “inteligente”

Pero la innovación no para ahí, ya que lo importante es lo que se puede construir con base en estas mejoras, porque existen implicaciones futuras más interesantes que garantizar una carga rápida de contenido HD en su teléfono. Por ejemplo, el tráfico vehicular podrá volverse realmente inteligente y con la transferencia de datos de alta velocidad en tiempo real y la baja latencia, los autos compartirán datos unos de otros, así como con las antenas.

A estas alturas del desarrollo, “imaginar” es la palabra clave cuando se habla de 6G. “Solo podemos especular ahora porque estamos en el comienzo de la tecnología”, dijo Rakesh, aunque puntualizó que “no quiero que se malentienda. Sí, hay desarrollo desde ya. Muchas empresas, así como gobiernos y otros jugadores en el mundo, están desarrollando sus propias tecnologías con miras a 6G. Pero, de alguna manera, pensar en algo tan novedoso me recuerda a lo que pasó con nuestras carreteras. Muchas de ellas fueron construidas hace 40 o 50 años sin tener en cuenta las velocidades y características que alcanzarían los autos que usamos hoy”.

Cuando no es posible atisbar lo lejos que se llegará, ni planificar con base en escenarios finales, lo único que se puede hacer es acordar un estándar tecnológico: características mínimas que permitan, para empezar, la interconexión o poner los fundamentos para el futuro.

Relación con la Inteligencia artificial

La tecnología 6G deberá coexistir de manera simbiótica con la inteligencia artificial y esto, al menos de dos maneras, por un lado, indica que esta red deberá beneficiarse de la IA a través de autodiagnóstico de errores y automatización de mantenimientos. Incluso la actual red 5G exige intervención humana más constantemente de lo que cabría esperar. 

“Cuando la IA esté integrada, la red se ejecutará con mayor autonomía o, al menos, será menos necesaria la intervención humana”, sostuvo el experto. La baja latencia es necesaria para quela inteligencia artificial generativa pueda desarrollarse y ofrecer servicios más robustos e interactivos.