Un nuevo paro de colectivos en el AMBA se palpita para dentro de un par de días si se mantiene la falta de acuerdo entre las distintas partes ante el reclamo de aumento salarial por parte de los choferes nucleados en la Unión Tranviaria Automotor (UTA).

Una reunión con las cámaras empresarias, el gremialista Roberto Fernández y el secretario de Trabajo, Julio Cordero, estaba prevista para este miércoles. Sin embargo, la cita ahora se fijó para el miércoles 24 de abril. Lo que las pase durante ese encuentro será clave de cara a una definición.

Si no llegan a un acuerdo, ¿cuándo hay paro de colectivos?

Desde la UTA se mantienen firmes: si no hay un aumento de $250.000, que llevaría el sueldo de los colectiveros a $987.000, habrá otro paro de colectivos. Las cámaras, por su parte, afirman que todavía falta la homologación del acuerdo y sostienen que no cuentan con los fondos para hacerle frente a este incremento.

Tras el paro de colectivos que la UTA llevó adelante el pasado 11 de abril, el gremio puso un ultimátum: como condición para no retomar las medidas de fuerza, la discusión paritaria debe resolverse antes del jueves 25 de abril. De lo contrario, ese día no habrá servicio de “bondis” de una gran cantidad de líneas de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano, por lo que moverse y llegar al trabajo será otra vez un caos.

¿Aumenta el boleto de colectivo?

Para hacerle frente al incremento de salario de los colectiveros, la propuesta de las cámaras al secretario de Transporte, Franco Mogetta, es que suba el boleto. Según trascendió, la propuesta rondaría en un aumento aproximado de $60, lo que llevaría el mínimo de $270 a $330. Afirmaron que, con el aumento del 22% del pasaje, podrían afrontar los pagos.

La Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA) sostiene que el costo “real” del boleto de colectivos es de $1.198 incluido el IVA. Los pasajeros cubren $270, el Estado pone $624 y los $624 restantes son cubiertos por las operadoras, quienes advierten por la crisis que generan esas pérdidas superiores a los $90.000 millones mensuales.

A la espera de cualquier tipo de definiciones, los principales afectados son los usuarios, quienes quedan como rehenes ante las medidas de fuerza que imposibilitan, en muchos casos, que se trasladen a sus puestos de trabajo con el riesgo de perder el presentismo de la jornada.

En siete días, a tan solo dos semanas de la anterior medida, existe la posibilidad latente de un nuevo paro de colectivos.