La Confederación Argentina de Sordos (CAS) y más de 53 asociaciones e instituciones de personas sordas de todo el país marchan esta tarde al Congreso de la Nación para reclamar el reconocimiento oficial de la Lengua de Señas Argentina (LSA) como idioma natural de las personas sordas en todo el país.

Cientos de personas participan de la convocatoria en "reconocimiento legal de la como una lengua natural y originaria que conforma el patrimonio lingüístico y cultural inmaterial de las personas sordas en todo el territorio de la Nación Argentina", una causa por la que CAS lucha hace más de 15 años.

La manifestación se produce en el marco del Día Internacional de las Lenguas de Señas, celebrado cada 23 de septiembre, “una oportunidad única para apoyar y proteger la identidad lingüística y la diversidad cultural de todas las personas sordas, además de otros usuarios de las lenguas de señas", señalaron desde la Confederación Argentina de Sordos.

En sintonía con el reclamo se recolectaron más de 120 mil firmas en apoyo a través de una importante campaña que llevaron a cabo desde más de 53 asociaciones nacionales. "Esta lucha colectiva pretende saldar esta deuda pendiente que el Estado todavía tiene con nuestra comunidad", indicó la CAS en un comunicado.

La iniciativa fue impulsada por las diferentes instituciones porque "desde hace décadas, miles de niñas y niños sordos e hipoacúsicos continúan sin lograr una fluidez nativa y un dominio completo de al menos un idioma natural, siendo perjudicados en su posterior desarrollo personal e inserción social".

Durante 2020 y 2021 la CAS junto con las asociaciones afiliadas encararon una campaña federal, divididas en seis mesas de trabajo regionales donde participaron una diversidad importante de personas sordas y oyentes, de diferentes ámbitos públicos y privados, académicos e institucionales, y desde los distintos rincones del país, para consensuar cuáles deberían ser los ejes rectores mínimos que una Ley Federal de Lengua de Señas Argentina.

"Afirmamos y creemos fundamental que este proyecto de ley se aborde, no desde una perspectiva de normalización y reparación, sino como una cuestión de derechos humanos. Todo niño tiene derecho a adquirir en forma temprana una lengua perceptualmente accesible, a recibir una educación de calidad, a participar plenamente de la vida social", afirmó la organización.

En este sentido, agregó que la deuda pendiente del Estado es "reconocer la LSA como tal y otorgarle un estatus lingüístico como toda lengua, avanzando sobre una ley de lengua de señas con los aportes, saberes y propuestas de las mismas organizaciones sociales de personas sordas, que son quienes utilizan diariamente la LSA".

Según la Federación Mundial de Sordos, a nivel global existen 70 millones de personas sordas usuarias de lengua de señas como primera lengua. En 62 países esta forma de comunicación local tiene reconocimiento oficial, mientras que en Sudamérica sólo dos países no tienen esta ley: Guyana y la Argentina.