Las verdulerías del país registraron los primeros incrementos de precios del 2022. Luego de que el tomate alcanzó la semana pasada los $300 por kilo, ahora le tocó a los vegetales de hojas verdes. La lechuga trepó en los últimos días hasta los $500 y se espera que la tendencia al alza se extienda al menos por un tiempo. Según explicaron desde el sector productivo, el aumento fue provocado por la última ola de calor que afectó especialmente a las zonas hortícolas de Buenos Aires, Mendoza y Santa Fe.

El precio de las frutas y verduras no parece tener techo. Algunos productos llegaron a duplicar su valor en las últimas dos semanas como consecuencia de las altas temperaturas registradas en todo el país durante la reciente ola de calor que causó estragos en algunas plantaciones.

En el cordón frutihortícola de Mar del Plata estiman que entre un 20% y 30% de la producción se perdió. Las jornadas con más de 40 grados quemaron una porción de las verduras de hojas, entre ellas, la lechuga.

En este contexto, productores hortícolas de Paraná, Entre Ríos adirtieron importantes pérdidas: “Son altísimas, rondan el 80%. Y no hay mucho que podamos hacer. En algunos lotes alcanzamos a regar, pero no nos alcanza para mucho. El 20% que está quedando de lo sembrado de lo que son verduras de hoja, como acelga, perejil y demás, se están quemando; los melones, típicos de esta época, también se están asoleando”, manifestó la semana pasada a UNO Daniel Brandolín, quintero de la región.

Las altas temperaturas tienen como consecuencia frutas y verduras de baja calidad, así como pérdidas a la hora de la recolección. El clima también impactó en el costo del brócoli, las espinacas y el verdeo, vegetales que registraron los mayores incrementos.

La papa

La zona de Buenos Aires dedicada al cultivo de papa se vio afectada por la falta de agua durante la ola de calor y causó una pronunciada escasez. Por este motivo el valor del tubérbulo se duplicó.

“Lo que subió mucho fue la papa, porque hay poca. Pasa que las altas temperaturas afectan la calidad, y si por ejemplo, hoy estás cargando papa en Mar del Plata, mañana llega a destino toda manchada; los mismos calores la van cocinando. También ha pasado con la cebolla”, lamentó Brandolín.

¿Cuándo llega el alivio al bolsillo?

El sector se encuentra en una situación compleja, ya que el calor ha pegado duro en lo que es la producción. A eso tenemos que agregarle la falta de agua”, explicó esta semana Omar Carrasco, presidente de la Unión Frutihortícola Argentina en declaraciones a La Nación.

En 30 días aproximadamente los precios se podrían volver a acomodar, ese el tiempo de crecimiento que necesita una verdura de hojas verdes desde que se siembra hasta la cosecha.

Consultado por el impacto de las últimas lluvias en los cultivos, aclaró: “En realidad está haciendo más daño a lo que ya estaba para cosechar, porque llovió mucho de golpe y hay bastante humedad; esto hace que se esté pudriendo lo que está en las plantas”.