Hepatitis infantil: dieron de alta al nene trasplantado
El nene de 8 años volvió a su casa después de 16 días de internación en un sanatorio de Rosario. El hígado fue donado por la familia de un joven fallecido en La Pampa. "Jamás olvidaré ese gesto", dijo la madre del menor.
Pablo, el nene de 8 años que enfermó de hepatitis aguda grave de origen desconocido y necesitó un trasplante de hígado, regresó este viernes a su casa de la localidad santafesina de Funes. El menor fue dado de alta con la consiguiente alegría de toda su familia y de su pueblo, más la satisfacción de los médicos por la evolución de su estado.
"Pablito se va a su casa. Todos sentimos una enorme satisfacción porque las cosas se hicieron bien", dijo Alejandro Costaguta, el pediatra que lo atendió durante su convalecencia. “Ahora está mirando la televisión, charlando. Es un nene como cualquier otro que se tomó un desayuno con vainillas”, detalló el pediatra un rato antes de firmar el alta, lo que demuestra el buen estado de ánimo del niño.
El caso de Pablo fue el primer detectado en la Argentina de hepatitis aguda grave de origen desconocido. Esta variante de la enfermedad se había registrado en países de Europa y América del Norte desde comienzo del año.
Qué le pasó a Pablo, el nene que recibió un trasplante de hígado
El cuadro de hepatitis que afectó a Pablo fue detectado al 4 de mayo. Tuvo que ser trasladado desde Funes al Sanatorio de Niños, en Rosario. Los análisis realizados mostraron que la variante de hepatitis que lo afectaba era diferente a todas las conocidas. Su estado de salud empeoraba y el hígado amenazaba con dejar de funcionar definitivamente. Por eso fue necesario el trasplante.
Una semana después, el 11 de mayo, apareció la oportunidad: una familia de la provincia de La Pampa autorizó la donación. Mediante un operativo especial, el órgano fue llevado en avión sanitario hasta Rosario y luego en helicóptero hasta el centro médico donde se realizó la operación, que duró casi ocho horas.
La respuesta favorable del chico hizo que lo pudieran pasar a una sala común. A los tres días despertó y continuó su recuperación hasta que los médicos autorizaron a que volviera a su casa.
"Jamás olvidaré a los padres que tuvieron ese gesto inmenso en medio de su dolor", dijo Vanessa, la mamá del pequeño, en agradecimiento a los familiares del joven fallecido que autorizaron el trasplante.
También señaló que "fueron muchísimas las muestras de cariño recibidas. Una carta de sus compañeros de su escuela y un dibujito que me mandaron pero que igual me lo llevo aunque no sepa de quién es. También le mandaron un video Di María (Angel, el jugador de la Selección) y un futbolista de Boca".
"Mi hijo no quiere que me vaya ni un minuto de su lado y yo tampoco. Lo único que necesito es estar cerca de él", aseguró la mujer.