Gran Hermano 2024: quién es Juan Pablo de Vigili, el correntino que sueña con ser actor y practica la meditación
La nueva edición de Gran Hermano 2024 arrancó con participantes muy diversos, entre los que se encuentra Juan Pablo de Vigili, un correntino apasionado por la actuación y la meditación, que aspira a dar tranquilidad en la casa con su personalidad serena y sus grandes deseos.
Gran Hermano 2024 arrancó con todo. Entre tantos ingresos, uno de los participantes que aún no causó demasiado revuelo en el público fue Juan Pablo de Vigili, un correntino con grandes aspiraciones de convertirse en un actor: su carisma y su interés por la meditación son los dos pilares con los que busca marcar territorio adentro de la casa y transmitir un poco de calma a sus compañeros.
Así, esta edición nueva del reality sorprendió con la diversidad de sus 24 jugadores, provenientes de distintas regiones de Argentina e incluso de países como Uruguay y Perú. Sin embargo, no todos tuvieron un camino fácil para ingresar al certamen, como es el caso de Juan Pablo, en el que la decisión implicó un cambio importante en su vida personal, ya que puso fin a su relación de pareja luego de que ella no aceptara su participación.
Quién es Juan Pablo de Vigili, el correntino que busca traer paz a la casa
Santiago del Moro fue el encargado de presentar a Juan Pablo de Vigili, uno de los participantes que promete dar de que hablar en esta edición de Gran Hermano 2024, aunque todavía no recibió mucha repercusión del público. Con 38 años, este correntino llegó a la casa con la firme intención de destacar, respaldado por una historia personal que refleja perseverancia y autenticidad.
Su objetivo es triunfar en el certamen manteniendo la honestidad como bandera y sin recurrir a estrategias cuestionables o a las mentiras, que es algo que no acepta. Dedicado a la arquitectura y la tarea empresaria, Juan Pablo combina su talento en el diseño con su espíritu alentador, que lo llevó a fundar su propio local gastronómico.
Sin embargo, su verdadera pasión siempre fue la actuación, un sueño que dejó en pausa durante años por las expectativas de su familia: “Me criaron pensando que debía enfocarme en los negocios, pero siento que este es el momento de cumplir mis anhelos”, confesó con determinación.
Tomar la decisión de ingresar al reality no fue sencillo, ya que implicó dejar atrás una relación sentimental. Según explicó, su expareja no aceptó su participación en el programa, por lo que optó por priorizar sus metas y avanzar solo, lo que dejó en claro su carácter decidido y su compromiso con sus propios ideales.
Además de su vida profesional, de Vigili incorpora la meditación como herramienta para mantenerse equilibrado y conectado consigo mismo. Esta práctica, que forma parte de su rutina, podría ser clave para lidiar con los desafíos y tensiones que la convivencia y la competencia puedan traerle en el reality: “Soy buena onda, trato de manejar el enojo. Me gusta competir, y esta es la oportunidad de mi vida”, aseguró.