Gisele Marchi se hizo conocida en 2011 gracias a su participación en  Gran Hermano. Gracias a su carisma y personalidad combativa, llegó a la final del reality y además, mostró que tenía el talento para perdurar en los medios de comunicación, sin embargo, por decisión propia, decidió alejarse de todo y emprendió un largo viaje por América, donde conocó a su pareja, que también era nómade. Actualmente, ambos recorren el mundo y se ganan la vida como cantantes a la gorra. 

A seis años de la última emisión del programa, Telefe comenzó una nueva temporada que está dando mucho que hablar y que está rompiendo todas las barreras de rating. Más allá de estas cuestiones, las redes sociales se transformaron en un actor fundamental no solo porque los usuarios van comentando lo que sucede a lo largo de la trasmisión de 24 horas, sino que también traen al recuerdo ex hermanitos que han marcado la historia del juego. Si bien en muchos casos siguieron vigentes en el ambiente artístico, otros prefirieron iniciar un nuevo destino. 

Una oportunidad para cambiar la vida 

Nació en Buenos Aires y vivía en la localidad bonaerense de San Fernando. Desde muy chica fue amante de lo artístico y la música, por este motivo no dudo en estudiar teatro y otras cuestiones relacionadas. A pesar de tener el sueño de ser una reconocida actriz, su realidad le era muy diferente. Según contó en su momento de mayor fama, durante su adolescencia se sintió muy insegura de su cuerpo y capacidades debido a que había estado en una relación que le hizo sentir que ella no era buena, pero tras separarse, volvió a luchar por sus anhelos y trabajó como preceptora de colegio y coordinó viajes de egresados a Brasil mientras se profesionalizaba como interprete. 

A principios del 2011, Marchi, vio la publicidad de Gran Hermano y enseguida pensó que era su oportunidad de poder mostrarse y que en un futuro todo su esfuerzo de frutos. Se inscribió en el casting y poco a poco fue superando etapas hasta que quedo finalmente fue seleccionada para entrar a la casa. Con 22 años dejo todo de lado y se metió de lleno a la competencia, de hecho, en su video de presentación, se caracterizó como soberbia, líder de grupo y leonina. 

Una jugadora que fue por todo 

En un primer momento, Marchi, se mostró con un bajo perfil y un juego muy pacífico, de hecho, fue una de las primeras nominadas de Gran Hermano 2011 junto con Rocío Gancedo. Las semanas que le siguieron, pudo conformar grupo con Pamela Bevilacqua y ambas fueron cómplices de distintos complots, que en algunos casos fueron descubiertos. Asimismo, sus primeros pasos estuvieron marcados por la seducción a algunos de los hombres, pero en la semana 7 fue eliminada por el público.  

Si bien fue expulsada por la decisión de la audiencia, jornadas después fue reincorporada en el repechaje. Su vuelta al certamen no fue tranquilo debido a que estaba mucho más combativa porque sabía con quién tenía que aliarse y a quien debía sacar. La pelea más notoria fue con Emiliano Boscatto, aunque también tuvo duras palabras para Cristian U y Solange Abraham. Finalmente, estuvo en total de 112 días y quedo en el puesto sexto de los finalistas. 

Una nueva vida lejos de todo 

Tras salir de la casa, tuvo la intención de ser actriz y permanecer vigente en los medios, pero su destino se volvió muy mediático y a rais de esto, se cansó de que todo se enfocara en su cuerpo y juventud, a pesar de que consideraba de que tenía talento para ser artista. Luego de pensarlo mucho y tener reiteradas crisis al respecto, sacó sus ahorros, se alejó de los medios de comunicación y se fue de viaje como mochilera con el principal objetivo de reencontrarse consigo misma. 

En medio de su aventura, conoció a Lucas Marqués, quien también estaba siguiendo una vida natural y nómade. Uno de sus primeros viajes fue a Pinamar donde desarrollaron el arte callejero, debido a que este plan les funciono, continuaron su itinerario por el sur de Argentina. Gracias a estas expediciones su relación se fortaleció y tomaron la decisión de abandonar el país para recorrer toda América, Europa y Asia. 

Con solo una mochila, una guitarra y un charango, recorrieron más de 20 países. Gracias a su música, la pareja abrió los ojos a nuevas realidades, aprendieron no solo a vivir con lo justo y necesario, sino que fueron adquirieron otros idiomas y lenguajes autóctonos de distintas regiones del mundo. Asimismo, conocieron celebraciones, rituales ancestrales de pueblos originarios y tomaron nuevas costumbres que se relacionan con el cuidado del ambiente y la buena alimentación. 

Si bien con sus presentaciones musicales subieron durante muchos años, también utilizaron el dinero ganado para dar talleres y ayudar a comunidades olvidadas. Cabe destacar que a pesar del avance tecnológico, Marchi y Marqués, continúan con su vida natural y no tienen redes sociales individuales. Hace poco tiempo, crearon un sitio web donde van contando sus aventuras y un canal de YouTube donde comparten la música y las presentaciones que realizan alrededor del mundo.