Jaaukanigás es una reserva natural completamente única en nuestro país porque es el segundo humedal más grande del territorio argentino. Este pintoresco sitio se encuentra "escondido" dentro del departamento de General Obligado, al noroeste de la provincia de Santa Fe y a pesar de que es "poco conocido", reúne un sinfín de maravillas naturales. Asimismo, se destaca que sus bellos paisajes invitan no solo a conocer de la historia nacional, sino que también da la posibilidad de desconectarse por completo de la rutina para vivir una aventura rodeada de adrenalina. Es decir que si estás buscando un lugar para disfrutar con amigos o pareja, este punto turístico es tu plan perfecto. 

Para muchos llegaron las vacaciones y otros están ansiando poder disfrutar de los lindos y cálidos días de verano. Si bien la Costa Atlántida bonaerense y las sierras cordobesas siguen siendo los destinos más populares en esta temporada 2023, la realidad es que se expandió el turismo por toda la Argentina y hay opciones para todos los gustos y presupuestos.

En esta oportunidad, te presentamos una hermosa isla del Río Paraná que está conectada con el casco geográfico santafesino a través de puentes. El principal acceso a este espacio se da desde la localidad aledaña de Villa Ocampo, que se ubican sobre la Ruta Nacional 11 a unas 6 horas en vehículo desde Rosario y a solo 15 minutos de la reserva provincial. Cabe destacar que si bien desde CABA son una 9 horas de viaje porque está a 879 kilómetros, vale la pena conocer este paraje nativo. 

Un paraíso único en Argentina  

Jaaukanigás fue declarado en 2001 como el primer Sitio Ramsar (humedal designado de importancia internacional por su gran reservorio de agua dulce) de la provincia de Santa Fe y el noveno en Argentina. Posee una superficie total de 492.000 hectáreas y contiene una muestra representativa del bioma llamado Delta e Islas del Paraná. Los abipones fueron de los primeros habitantes de esta región natural y, a pesar de que desaparecieron durante el proceso de colonización, su distinguido nombre hace honor al la lengua madre de dicho pueblo y significa "Gente del agua".

Sus paisajes son completamente alucinantes porque se caracteriza por poseer gran diversidad de ecosistemas. Se pueden observar desde numerosos arroyos, ríos con aguas cristalinas, lagunas mansas y repletas de flores acuáticas. Asimismo, se destaca que la región tiene bosques y selva a la vez. A raíz de esta cuestión, se estima que el 30% de los vertebrados totales de nuestro país se encuentran en este lugar, ya que hay más de 520 especies entre las que se incluyen anfibios, reptiles, aves y mamíferos. 

Así como en la fauna, la flora también presenta una gran biodiversidad en sus especies. Son numerosas las comunidades vegetales presentes, pero entre las más importantes se pueden señalar la inmensa variedad de árboles que se ubican a los costados de los canales de agua dulce. Otro espectáculo natural que enloquece a los visitantes es su variedad de plantas y flores silvestres que nacen sobre los ríos, lagunas y arroyos que regalan paisajes que parecen de otro mundo. 

Por otro lado, este increíble sitio resalta los valores sociales y culturales, ya que no solo representa parte de la historia de los pueblos originarios de Argentina, sino que también le abrió la puerta al Ecoturismo que busca concientizar acerca del cuidado del medioambiente nacional a través de la educación. Asimismo, actualmente en la zona siguen habitando algunas comunidades de personas que eligen vivir de manera natural y alejadas de las tecnologías que hoy dominan la cotidianeidad. 

¿Qué hacer en Jaaukanigás? 

Este hermoso humedal tiene opciones para todos los gustos y presupuestos. Para aquellos que deseen conocer más de la historia de la región, existen además importantes yacimientos arqueológicos que se encuentran expuestos en los Museos de las localidades aledañas de Villa Ocampo y Reconquista. 

Como se mencionó anteriormente, el Ecoturismo adquirió gran importancia y se habilitaron actividades para aquellos que sean más aventureros. Por ejemplo, se pueden realizar cabalgatas, caminata o ciclismo por el bosque o la selva. Otra gran opción para sentir adrenalina son los deportes acuáticos donde se destaca el ski, windsurf, canoismo, entre otros. Si preferís los planes más tranquilos, no podés dejar de hacer el safari fotográfico que invita al avistamiento de flora y fauna.