El brote histórico de dengue que atraviesa el país, con más de 180.000 casos y 130 muertos, llevó al Gobierno nacional a suspender durante 30 días la intervención de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) a la hora de importar repelentes para mosquitos. La medida abarcará la importación de aerosol, crema, spray y gel repelente.

"Dicha excepción será tanto para el régimen general -importadores con despachos a plaza- como para el régimen particular de manera que las personas que quieran comprar dichos productos en el exterior podrán hacerlo a través del servicio courier (puerta a puerta) sin necesidad de efectuar trámites adicionales ante la ANMAT", precisó días atrás el vocero presidencial Manuel Adorni.

La intención del Ejecutivo es poner freno al aumento de los casos, aunque los resultados no estarán de inmediato. Ocurre que la importación de repelentes demorará de una a dos semanas. El plazo menor podría lograrse trayendo el producto de Brasil, al considerar un ingreso vía terrestre con 48 horas de viaje y una cadena de distribución que trabaje al tope de su capacidad.

Según fuentes del sector, el tiempo más razonable para la importación de repelentes rondaría los 15 días: siete de producción, tres de transporte y alrededor de cinco para que la cadena de distribución coloque los productos en las góndolas de comercios y grandes cadenas de supermercados.

Ahora bien, ¿y los precios? En el caso de los repelentes importados desde Brasil, deberían costar entre $3.000 y $4.500, aunque especialistas del mercado reconocieron que los valores sean mayores mientras dure el brote y falte este tipo de producto.

"En una medida que demanda enormes esfuerzos, y para proveer de repelentes a los argentinos, estamos importando productos desde Polonia, entre otros mercados, los cuales estarán arribando próximamente", señaló la compañía SC Johnson, encargada de las marcas OFF!, Fuyí y Raid.

A través de un comunicado, la empresa afirmó que la "situación sin precedentes" afectó a toda la cadena de suministro involucrada, que "está trabajando al máximo de sus capacidades". "Hemos aumentado la capacidad de nuestra planta de producción que trabaja de manera ininterrumpida", puntualizó en el texto, tras indicar que, como medida extraordinaria, aprobó la venta de distintos formatos de envases que no estaban en el mercado para poder aumentar la disponibilidad de sus productos.