Asquerosa plaga: miles de cascarudos invadieron La Pampa
En la localidad de Santa Isabel decidieron apagar el alumbrado público para intentar acabar con la plaga que los azota desde hace dos semanas. ¡Mirá las fotos!
Desde hace aproximadamente 15 días, una invasión de cascarudos azota a la zona de Santa Isabel en La Pampa. Si bien es cierto que en otras partes del país se ha visto un importante aumento de estos insectos, en esta localidad se tornaron en un verdadero problema, incluso, invadiendo techos por completo.
Este fue el caso, por ejemplo, de la comisaría del lugar en donde la cantidad de bichos dañó la estructura de la seccional, ya que cuando los lograron retirar del techo, se dieron cuenta de que habían atravesado la membrana y tuvieron que levantarla para sacarlos todos.
"Es impresionante la cantidad que hay. En algunos casos, dañaron techos de construcciones. En la comisaría levantaron la membrana y en un local comercial, el cielorraso. En la estación de servicio taparon los desagües", señaló a InfoHuella, Omar Sabidini, Jefe de la Departamental Santa Isabel.
Tomaron medidas extremas para acabar con los cascarudos
Aunque suelen estar en la zona rural, en los últimos días se desplazaron hacia el casco urbano y los habitantes del lugar aseguraron que caían en los techos y parabrisas de los autos como si fuesen granizo.
Atentos a las quejas de los vecinos y comerciantes por los daños provocados por los cascarudos, desde la Municipalidad decidieron apagar el alumbrado público ya que tienen fototaxia [se sienten atraídos por la luz intensa].
"Están en todas partes. En domicilios particulares, en comercios. Hoy me reuní con el Concejo Deliberante, Bomberos Voluntarios, Policía y personal de la Administración Provincial de Energía, para consensuar una medida. Se resolvió apagar el alumbrado público ya que este insecto busca los lugares con iluminación", señaló el viceintendente a cargo del municipio, Cristian Echegaray.
Qué daños producen los cascarudos
Hay que partir del punto de que no le "pican" al ser humano, pero poseen un cuerpo sólido, con alas esclerotizadas que les permiten incluso excavar y escabullirse por los rincones. Además, chocan violentamente con todo lo que se les cruza por el camino por lo que es recomendable que la población que esté bajo esta invasión, se cubra el rosto para evitar lesiones.
"Si bien presentan piezas bucales masticadoras, no pueden producir daño a las personas, aunque sí las molestias por el roce con su cuerpo duro y compacto y las espinillas que presentan en los tres pares de patas", explicó la ingeniera agrónoma, doctora en ciencias biológicas e investigadora asistente del CONICET, Selene Niveyro.