Cuáles son las enfermedades típicas del invierno y cómo prevenirlas
Los virus respiratorios circulan con más frecuencia durante la época invernal. Enteráte cuáles son y seguí las recomendaciones de especialistas para prevenir los contagios.
Los virus respiratorios circulan con más frecuencia durante la temporada invernal. Esto provoca un aumento de consultas médicas e internaciones de pacientes con bronquiolitis, influenza, Covid-19 y neumonía, entre otros. La prevención -advierten los especialistas- es fundamental en esta etapa del año.
Con el frío, aumenta la circulación de los virus respiratorios, pero no solo por las bajas temperaturas, sino también porque las personas pasan más tiempo en espacios cerrados, poco ventilados, y así se incrementan los contagios.
La gripe, el resfrío, la bronquiolitis, la influenza (especialmente la A) y el Covid-19 son las enfermedades más prevalentes en época invernal. Por ello, expertos en salud recomiendan lavarse periódicamente las manos, ventilar los ambientes y respetar los esquemas de vacunación para cuidarse.
"Las enfermedades respiratorias empeoran en época invernal. El aire frío con temperaturas o humedad muy bajas o muy altas provocan cambios en el sistema de defensas del organismo y el sistema inmunitario", explicó a Télam Ana Stok, neumonóloga.
La especialista señaló que hay una disminución de lo que se llama interferón, que es el sistema de alerta que cuando ingresa un virus o una bacteria hace que el sistema inmunitario se fortifique y lo combata. "Cuando hay un medio ambiente muy frío nos baja el interferón y esto hace que nos bajen las defensas y el sistema inmunitario de la vía aérea. Además, en épocas frías los virus se vuelven más estables y duran más tiempo en el medio ambiente por lo que hace que puedan infectarnos con más facilidad", sostuvo.
Si bien los virus respiratorios afectan a toda la población, es importante tener especial atención en menores de 5 años y personas mayores de 65 años, que pertenecen a los grupos más riesgosos.
Por su parte, el presidente de la Asociación Argentina de Alergia e Inmunología Clínica (AAAeIC), Maximiliano Gómez, explicó que hay que distinguir las enfermedades contagiosas de las no contagiosas. "Cuando no tenemos antecedentes y de repente iniciamos con fiebre, tos, mucosidad y flema acompañados de dolor que puede ser a nivel de la garganta, pecho y dolor corporal es indicativo de una enfermedad contagiosa infecciosa", detalló.
Bronquiolitis
"Las enfermedades que más vemos son las gripes y la influenza, como así también el coronavirus. En los niños es muy frecuente, además, el virus sincicial respiratorio (VSR) causante de bronquiolitis o rinovirus", manifestó Stok.
Se trata de una inflamación de las vías aéreas pequeñas (bronquiolos) que afecta a lactantes menores de 2 años, aunque en el último brote se registraron casos en chicos de hasta 5 años. “El diagnóstico se determina por el examen clínico. En la mayoría de los niños, la bronquiolitis es una enfermedad autolimitada y el paciente puede ser tratado en el domicilio con tratamiento sintomático”, comenta la Dra. Valeria El Haj, Directora Médica Nacional de Ospedyc.
Pautas de alarma a tener en cuenta: respiración rápida, con silbidos o ronquidos, se le hunde el pecho al respirar, tiene más de 38° de fiebre de manera persistente, tiene mocos, pérdida del apetito, no puede beber o amamantarse y decaimiento.
Resfrío y gripe
Por otro lado, los resfríos se caracterizan por estornudos y secreción acuosa nasal, lagrimeo y suelen estar acompañados por fiebre moderada y dolor de garganta, con ocasional dolor de cabeza pero sin comprometer el estado general de la persona. Evolucionan a la curación en un tiempo aproximado entre 7 y 10 días.
A su vez, la gripe tiene síntomas similares al resfrío, pero provoca además malestar general, dolor corporal y fiebre, y ocasionalmente puede provocar tos, que en general es seca, mientras que los resfríos pueden dar tos si cae mucosidad desde la nariz a la garganta.
Los virus más comunes de la gripe son los virus Influenza de tipo A e Influenza de tipo B y se caracteriza por el inicio súbito de fiebre, tos (generalmente seca), dolores musculares, articulares, de cabeza y garganta, intenso malestar y abundante secreción nasal. “Los demás síntomas suelen desaparecer en la mayoría de los casos en el plazo de una semana, sin necesidad de tratamiento médico”, explica la Dra. El Haj.
La gripe estacional tiene fácil propagación y se transmite rápidamente. Al toser o estornudar, las personas infectadas dispersan en el aire, a distancias de hasta 1 metro, gotitas que contienen el virus en su interior, infectando así a las personas cercanas que inspiran esas gotitas. El virus puede permanecer activo durante horas en un ambiente frío y con poca humedad, la transmisión aumenta en lugares cerrados con gran concentración de personas.
Tanto el resfrío como la gripe suelen ser características de esta estación, a diferencia de la neumonía, que puede aparecer en cualquier época del año porque "depende del estado inmunológico de las personas, aunque es más frecuente en época de frío", explicó Gómez.
En ese sentido, la neumonía se caracteriza por fiebre y tos productiva con mucosidad de color (no es blanca o transparente como en la gripe o resfrío) y dolor localizado en el tórax, con afectación del estado general de la persona (malestar o decaimiento). "Las personas más susceptibles a estas enfermedades son los niños y los adultos mayores que ya de por sí tienen una inmunidad un poco más baja que una persona adulta o un joven", dijo Stok. Y agregó que en los más pequeños estas virosis pueden llevar a la bronquiolitis.
Prevención
El Ministerio de Salud señaló que para prevenir enfermedades respiratorias es importante lavarse las manos periódicamente, especialmente después de tocar manijas, dinero, objetos de oficina, juguetes de otros niños, etc.
Además, recomendó usar alcohol en gel cuando no haya agua y jabón para lavarse las manos; toser y estornudar cubriéndose la boca y la nariz con el codo; y limpiarse la nariz con pañuelos descartables.
También es importante evitar el contacto con personas que tengan enfermedades infectocontagiosas; evitar el humo de cigarrillos y los braseros cerca de los niños; ventilar los ambientes; y mantener los esquemas de vacunación al día, de acuerdo al Calendario Nacional de Vacunación, entre las cuales se incluyen la vacuna de la gripe y la de neumococo.