A dos días de la victoria en las urnas, el comando de campaña del ministro de Economía y candidato presidencial de Unión por la Patria (UP), Sergio Massa, puso en remojo los festejos y ya piensa en cómo ganarle el mano a mano a Javier Milei el próximo 19 de noviembre. “Hay que trabajar porque queda mucho por delante, otro debate clave y de vuelta a recorrer el país, a contar nuestras ideas y propuestas”, resumieron a cronica.com.ar desde las oficinas ubicadas en el microcentro porteño. Allí se delinea ya la estrategia para “seguir creciendo” de cara al balotaje bajo las premisas de “un gobierno de unidad nacional y el fin de la grieta”. Con la misma tenacidad, se anotan los pronunciamientos “no a favor sino en contra” de La Libertad Avanza.

“Todavía no ganamos nada, por ahora tengo la mayoría en la primera vuelta. Falta mucho", aseguró Massa esta tarde al retirarse del Palacio de Hacienda ante los periodistas que lo esperaban en la puerta. El ministro venía de inaugurar una escuela secundaria con orientaciones en Robótica, Economía del Conocimiento y Metalmecánica en territorio bonaerense; y de anunciar la subasta mediante la cual llegará la tecnología 5G al país en el CCK.

También, de acordar con Leonardo Santoro (UP), el segundo más votado en la ciudad de Buenos Aires, un paso al costado de la segunda vuelta con Jorge Macri (ahora jefe de Gobierno electo). La prioridad es la nacional, contrastar con Milei y no con el macrismo.

Es que el último domingo Unión por la Patria subió 10 puntos en todo el país desde las PASO y Massa, individualmente, 15 puntos, pero no está todo dicho. “Un caso único de mejora en las generales”, se limitaron a celebrar los que tejen detrás del candidato.

Salió primero con casi el 37% de los votos y en su entorno entienden que ese crecimiento podría sostenerse en el camino hacia el balotaje mientras Milei “tiene un techo” de 30% o, en otras palabras: “el voto bronca tiene un cupo limitado”. La afirmación se basa en que si era por el antiperonismo, el voto “útil” podría haber optado por Milei en vez de ir a Patricia Bullrich (Juntos por el Cambio)  -la tercera con el 24% de los votos-. 

Sergio Massa se prepara para el balotaje con Javier Milei

En las próximas cuatro semanas, Massa se dedicará a contar por qué el último round electoral entre dos propuestas sólo presenta una que busca “construir en vez de destruir”. Su discurso “amplio” del último domingo, con la bandera de fondo, él en el centro, la familia al lado fueron el primer mensaje de quien “ya se muestra como Presidente”. “Un Presidente, no un meme”, insisten desde sus filas en una rápida comparación.

Mientras tanto, en la vereda de enfrente el techo empieza a “crujir”. Además del rumor en las últimas horas sobre la posibilidad de que el libertario se baje de la carrera -ya desmentido desde sus filas-, en el búnker de UP observan que a Milei le será “muy difícil salir del problema que tienen los discursos radicalizados y de los extremos porque ahora no tiene márgen para desdecirse”. Massa, en cambio, puede atraer a los que hasta ahora militaban en otra fuerza porque “nunca desacreditó a nadie”.

Con ese objetivo, Massa reunió al comando de campaña en el búnker de la calle Mitre el día después de la elección. “Hay que ampliar”, se escuchó y definió los próximos pasos con la mesa chica: el ministro del Interior, jefe de campaña de UP y senador electo, Eduardo “Wado” de Pedro; la presidenta de Aysa, Malena Galmarini; el vicejefe de Gabinete, Juan Manuel Olmos; la presidenta de la Cámara de Diputados, Cecilia Moreau; el consultor catalán en comunicación, Antoní Gutiérrez Rubí; el responsable de Comunicación Estratégica del Ministerio de Economía, Santiago García Vázquez; entre otros.

El ministro - candidato volverá a recorrer varias provincias -la única que figura por ahora como "seguro" en la lista es Córdoba- y continuará dando señales desde la gestión sobre qué tipo de gobierno propone a partir del 10 de diciembre.

“Los movimientos serán similares a los de las últimas semanas antes de las generales donde nos fue muy bien y a Milei muy mal”, aseguraron. Esa conclusión incluye iniciativas como la de habilitar un registro para que den de baja el subsidio de transporte quienes no necesitan recibirlo, también entrevistas con periodistas “no tan amables” con el peronismo pero menos con las ideas de Milei.

Es un tren al que Massa intentará subir al arco político. A radicales -hoy hubo algunos indicios de acercamientos en la previa de reuniones internas de Juntos por el Cambio- , a la izquierda, al peronismo disidente cordobés y a “todos aquellos que no quieran el caos”.

La invitación, según estiman, se combinará con una mayor exposición del libertario quien “no tiene margen para estar escondido como hizo antes de las generales”. En el comando de campaña ya se estudia, además, para un acontecimiento “clave”: el 12 de noviembre cuando Massa tenga su debate con Milei. “Ahí es mano a mano”, se entusiasman en UP. Una semana después se elegirá al próximo Presidente.

Por F.G.