La Aduana enviará intimaciones a unas 500 empresas que importaron mercadería al dólar oficial a través de cautelares judiciales. La acción del organismo se da luego de realizar una fiscalización sistémica con el objetivo de detectar inconsistencias. 

A los importadores se les requerirá documentación relativa a la operación comercial, las transferencias de titularidad realizadas, el detalle de giros de divisas y el destino dado a la mercadería, entre otras cosas.

Las empresas deberán presentar documentación relativa a la operación comercial, transferencias de titularidad realizadas, detalle de giros de divisas y destino dado a la mercadería.

También tendrán que explicar si el producto se encuentra en stock o si fue vendido; en este último caso, informar el valor de venta en mercado interno y el nivel comercial de los intervinientes.

La notificación da un plazo de diez días para responder con toda la información solicitada. A quienes la recibirán se les comunica que, en caso de incumplimiento, su inconducta “será considerada incursa en la figura prevista y penada por el artículo 994 incs. a) y b) del Código Aduanero, sin perjuicio asimismo de la aplicación de las sanciones contempladas en el artículo 100l”.

La norma en cuestión, prevé apercibimientos, suspensión de hasta dos años y eliminación por completo del registro de importadores y exportadores. La Dirección General de Aduanas, organismo que encabeza Guillermo Michel, impondrá medidas de control específicas en las empresas que se detecten inconsistencias o incongruencias en la información proporcionada.