En el nuevo Gobierno presidido por Javier Milei, el Ministerio de Salud pasará a ser una de las cuatro secretarías claves que integrarán el ministerio de Capital Humano liderado por Sandra Pettovello. Sin embargo, una aparente crisis habría ocasionado el distanciamiento de Eduardo Filgueira Lima, quien era mencionado para encabezar la cartera de Salud, aunque su nombre aún no había sido confirmado por el presidente electo.

Filgueira Lima es un médico que se desempeñó como secretario de Salud del gobierno peronista de La Pampa en 1993 y en 2002 y este último año fue designado subsecretario de Salud de la Nación durante el gobierno de Eduardo Duhalde. 

En agosto pasado se hizo conocido porque en declaraciones periodísticas apuntó contra el hospital público: afirmó que quienes se atienden allí son “personas cautivas” y aseguró que en el sistema estatal de salud “no hay incentivos para mejorar: tres trabajan y dos se rascan”.

Pero una fuerte discusión entre Pettovello y Filgueira Lima habría sido la causa de su decisión de dar un paso al costado. De manera que de momento aún no está definido quién quedará a cargo de Salud.

Sin embargo, en el núcleo de La Libertad Avanza, circulan otros nombres en danza acerca de las personalidades que podrían asumir la conducción de la nueva Secretaría. ¿Quiénes son? Por un lado, resuena el nombre del ex ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Claudio Zin, el pediatra e infectólogo, Roberto Debbag y el pediatra, Carlos Kambourian, quien integró los equipos técnicos de Patricia Bullrich.

Otro de los nombres que se barajan es el Fernán Quirós, que es el ministro de Salud del actual jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. También se analiza a Sebastián Neuspiller, que es médico y fue ex superintendente de Servicios de Salud durante el mandato de Mauricio Macri. 

Pero ¿Cuál habría sido el motivo que llevó al alejamiento de Filgueira Lima? Según trascendió, la causa habría estado vinculada al anticipo del organigrama de la futura Secretaría, cuya estructura oficial preveía la eliminación de la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS), ente autárquico que administra los fondos de las obras sociales.

De manera que desde La Libertad Avanza proyectarían dividir la SSS en dos estructuras nuevas y de menor categoría: la Dirección Nacional de Seguros de Salud y la Dirección Nacional de Medicamentos Excepcionales. Esta última absorbería el control del Fondo Solidario de Redistribución (FSD).