El precio de los alimentos aumentó un promedio de 12,8% en septiembre pasado y el azúcar, por puntualizar un artículo comestible que grafica la disparada en los valores, lleva acumulado un incremento de 289% en los últimos doce meses, de acuerdo a un relevamiento de la consultora Focus Market.

El trabajo privado tuvo en cuenta 682 productos de consumo masivo de diferentes marcas y presentaciones, pero muchos alimentos se metieron entre los diez artículos con mayores incrementos en el mes pasado: puré (+27,4%), huevos ( +22,9%), enlatados de pescado (+22,7%), snacks (+21,9%), té (+21,6%) y sal (+20,8%).

"En dos meses, la devaluación del tipo de cambio oficial mayorista de agosto fue devorada por la inflación. Mantenemos una variación de precios muy elevada a pesar del ancla del tipo de cambio en $365", evaluó el director de la consultora, Damián Di Pace, en un comunicado. Se refirió así al salto del 21,8% dispuesto por el Banco Central de la República Argentina (BCRA).

Y, lamentablemente debido a que su consumo no distingue por clases sociales y son sumamente necesarios en los sectores más vulnerables, los alimentos sufrirán un fuerte incremento en los precios durante los próximos días producto de la nueva escalada del dólar blue, según estimaron este jueves especialistas consultados por cronica.com.ar.

La divisa estadounidense acumuló en el mercado informal un incremento de $55 pesos en lo que va de la semana, debido a que abrió el lunes a $800 y en el mediodía de este jueves se vendía a $855, por lo que alcanzaba un nuevo récord.

El economista Alberto Siglióccoli explicó este jueves a este medio que, “en teoría, la suba del dólar blue o informal no debería afectar los precios de los productos, pero en Argentina y en la situación particular del país no es así”.

“Como no hay dólares en el Banco Central, prácticamente no se consiguen. Los importadores no los consiguen; de hecho los importadores actualmente tienen una deuda comercial con sus proveedores del exterior que se calcula que ya supera los 15.000 millones de dólares”, sostuvo.

El especialista completó: “Entonces, como no se consiguen dólares al precio oficial, se recurre al dólar blue o informal. Éste es el mecanismo por el cual la suba del dólar blue termina afectando directamente o indirectamente los precios de los productos”.

Su colega Ricardo Eugenio Gerardi, a su turno, coincidió: “En la medida en que se pueda pasar de un régimen de alta inflación a uno de hiperinflación, el valor del dólar blue va adquiriendo mayor referencia para toda la economía”.

Y ése es el panorama debido a que la inflación de agosto pasado fue del 12,4% y de 124,4% en la medición interanual, con lo que acumuló un alza de 80,2% en los primeros ocho meses del año, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). De esta forma, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del mes último fue el más alto desde febrero de 1991, cuando Argentina estaba de salida de la hiperinflación.

¿Por qué puede impactar con fuerza el incremento del blue en los alimentos y a cuáles alcanzaría?

Por su parte, el economista Isaac Rudnik, director del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (ISEPCI), dijo este jueves a cronica.com.ar que, “en general, los productos que más aumentan con los procesos devaluatorios, por lo menos que reciben la repercusión inmediata, son los que están ligados a la exportación”.

“O que están dentro de la cadena de productos cuyos primeros eslabones de producción y comercialización son artículos que forman parte de la cadena de exportación. Esos son los lácteos y las carnes. Dentro de las carnes, el pollo y el cerdo fundamentalmente”, detalló.

El experto explicó: “Porque el maíz, que es uno de los cereales que se exporta, tiene un nivel de exportación importante y es el primer eslabón de la cadena alimenticia de bovinos, porcinos y pollos”. 

Por su lado, Siglióccoli coincidió. “La suba del dólar blue, en definitiva, termina afectando los precios de los productos en general. ¿Cuáles son los primeros alcanzados? Los afectados en primera instancia son todos los productos importados; algunos alimentos como la banana”.

El experto, por último, explicó que las empresas buscan uniformar el precio de los artículos que exportan con el valor de los que venden en el mercado local. “Por lo tanto, para equiparar ese precio que consiguen en el extranjero en dólares, aumentan los valores domésticos; por ejemplo, harinas y aceites son algunos de los productos alimenticios que primero se ven afectados”, finalizó.