Pelea por celos, amenazas y una amante: las claves para aclarar el asesinato del famoso ex piloto de TC Carlos Garrido
A raíz del crimen, que se consumó a finales de abril en la zona sur del territorio bonaerense, los funcionarios policiales apresaron al casero de la víctima, a quien habría agredido a golpes en una pelea, originada en motivos pasionales. Se afirma que el sospechoso era amante de la ex mujer de su empleador. DETALLES EXCLUSIVOS.
Se conocieron impactantes detalles con respecto al esclarecimiento del homicidio de Carlos Alberto Garrido, famoso ex piloto de Turismo de Carretera (T.C.), quien en abril había aparecido asesinado a golpes, en el interior de su vivienda, en el sur de la Provincia de Buenos Aires. Por este crimen, fue detenido el casero de la víctima, de 34 años, quien se cree que habría agredido a su patrón a raíz de motivos pasionales.
Voceros judiciales revelaron a cronica.com.ar que este sospechoso, identificado oficialmente como Osvaldo Asebedo, resultó apresado el jueves, durante un allanamiento concretado en una finca, situada en República Árabe de Siria al 1500.
De acuerdo a lo señalado por los informantes, el individuo figura sindicado de haber sido amante de la ex esposa de Garrido y habría matado a la víctima en una pelea.
Al presunto homicida se lo alojó en la Unidad Penitenciaria N° 44, en Batán, luego de incautarse en su poder un aparato de telefonía celular, cuyo contenido tendrá que ser analizado.
Tal como se publicó en su momento, el cadáver de la víctima fue hallado en la noche del 29 de abril en una vivienda ubicada en el kilómetro 21,500 de la ruta provincial 88, en la zona conocida como El Boquerón.
Integrantes de la comisaría 8ª del distrito arribaron de inmediato al escenario del crimen, donde observaron a Garrido, que yacía fallecido en una galería y justo en un sector de acceso al inmueble principal. Mientras tanto, un Citroën C4, con dominio AF231HI y que era utilizado por la víctima, fue localizado incendiado, a unos 400 metros del lugar del asesinato. El occiso tenía 66 años.
Peritos de la delegación local de la Policía Científica, al ser convocados por las autoridades de la Justicia, revisaron el cadáver y, entonces, lograron determinar que presentaba golpes en la región de la cabeza, incautándose, a su vez, un cuchillo, que habría sido utilizado en una disputa.
Asebedo tenía una lesión cortante en una de las manos y les dijo a los funcionarios policiales que había sido herido, durante un forcejeo, que mantuvo con un delincuente que ingresó al terreno, quien lo desmayó a golpes en su dormitorio. La habitación se encontraba desordenada y se advirtieron pequeñas manchas de sangre en el suelo.
Hemofilia tipo A
Servidores públicos de la Dirección Departamental de Investigaciones (D.D.I.) marplatense se ocuparon de las diligencias y, en base a informes médicos, se certificó que Asebedo sufre de hemofilia de tipo A y que, por tal razón, era lógico que se encontrara una gran cantidad de sangre en el lugar.
Pero ante la ausencia del tejido hemático, el doctor Alejandro Pellegrinelli, fiscal de la Unidad Funcional N° 5 y a cargo del expediente judicial, consideró que el supuesto asesino se habría inyectado su medicación, en los minutos previos a recibir esa lesión en una mano.
En forma inmediata, se descartó por completo un robo, ya que en la casa habitada por el ex piloto había numerosos electrodomésticos y solamente se apreciaba desorden en su dormitorio.
Amante
Testimonios posteriores aseguraron que el casero y la ex pareja de Garrido mantenían un romance, lo que habría generado que el ex deportista amenazara, por celos, a ambos amantes.
Pellegrinelli sostiene que el sospechoso, luego de agredir a su empleador, intentó cargarlo en el coche, pero que no pudo hacerlo, debido a que la víctima pesaba más de 90 kilogramos y porque Asebedo padece una discapacidad en una de las rodillas.
Además, un detalle que llamó la atención de los uniformados fue que había "un cortafuegos" en las inmediaciones del vehículo incendiado, estimándose que el mismo se implementó para de esta forma impedir que las llamas se extendieran hasta un campo, en el que trabajaba el casero de Garrido.
Autoridades de la Superintendencia de Investigaciones en Función Judicial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires se encargaron de supervisar los diferentes procedimientos.
Preventivamente, la causa penal se mantiene caratulada “Homicidio”.
Por F.V.