Vecinos de la zona centro de la ciudad de Rosario, fueron testigos de un dramático episodio, cuando un nene de once años quedó al borde del precipicio tras pasar la baranda del balcón de su casa y quedar enganchado en la red de protección pero del lado de afuera. En medio de la conmoción, gracias a un rápido accionar de dos repartidores que pasaban por la zona, el menor logró ser rescatado. 

El hecho ocurrió este viernes al mediodía en un edificio situado en la avenida Pellegrini y Corrientes, zona centro de la ciudad de Rosario.

El nene comenzó a romper una malla de protección dispuesta sobre el perímetro del balcón y quedó atrapado entre la red y la estructura, a punto de caer. Su hermano, unos años más grando lo tenía atrapado pero no lograba hacerlo reingresar al piso.

La escena generó conmoción y llamó la atención de los transeúntes, entre ellos dos repartidores que al ver que el menor estaba colgado, no dudaron en frenar el camión en el que circulaban, y asistir al nene para evitar un desenlace fatal. 

Después de lograr ingresar a la propiedad, los repartidores rompieron la puerta de ingreso y entraron al departamento, rápidamente rompieron la red y otra persona, que por el momento no se identificó, logró atrapar al nene y ponerlo a resguardo, según consignó el medio local televisivo de De 12 a 14 (El Tres).

"Vimos que la gente miraba para arriba, veo al nene colgado y que todos estaban en shock. Empezamos a golpear las puertas y nadie quería abrir hasta que llegó un hombre, entramos y rompimos la puerta para poder entrar. Pensé que podía ser mi hijo y no me importó nada", relató uno de los repartidores, al que no le fue indiferente la situación de peligro en la que estaba el menor.

"Bajamos del camión y lo dejamos en medio de avenida Pellegrini, no me importó nada. Sólo quisimos rescatar al nene, que (al parecer) tiene autismo. Entonces subimos hasta el noveno piso y empezamos a darle patadas a la puerta del noveno piso", relató.

Tras romper la puerta de ingreso, se ubicaron en el balcón superior. Fue así que uno de los repartidores se puso cabeza abajo y estiró los brazos con ayuda del compañero y lograron poner a salvo al nene. Mientras al lugar llegaban Bomberos Zapadores y Voluntarios.

En el 2018, en ese edificio el menor ya había sido rescatado

Cabe destacar que no es la primera vez que el menor es protagonista de un episodio de estas características.

Es que esto ya había pasado 2018 cuando en ese mismo edificio el nene de por entonces ocho años que sufriría retraso madurativo estuvo a punto de caer al vacío y también fue rescatado milagrosamente, en aquella oportunidad por vecinos.