Los ocho incriminados por la muerte de Diego Armando Maradona deberán ir a juicio para determinar el rol de cada uno en el delito caratulado como “homicidio simple con dolo eventual”, tras la confirmación de la Cámara de Apelaciones y Garantías de San Isidro.

Son ocho los imputados: el neurocirujano Leopoldo Luciano Luque, la psiquiatra Agustina Cosachov; el psicólogo Carlos Ángel "Charly" Díaz, la médica coordinadora de la prepaga Swiss Medical, Nancy Edith Forlini; el coordinador de enfermeros Mariano Ariel Perroni, los enfermeros Ricardo Omar Almirón y Dahiana Gisela Madrid; y el médico clínico Pedro Pablo Di Spagna.

Los camaristas Carlos Fabián Blanco, Gustavo Adrián Herbel y Ernesto García Maañón fallaron en conjunto y determinaron que todos los anteriormente mencionados deberán someterse a un juicio oral respecto a la muerte del astro del fútbol, fallecido el 25 de noviembre del año 2020 por graves afecciones en su organismo.

Los miembros de la cámara de apelaciones entienden que los acusados son responsables de “las acciones u omisiones que consideraron reprochables a cada uno de los imputados y que, a su entender, habrían incidido en el fatal desenlace endilgado".

Cabe destacar que el Juez de Garantías, Orlando Abel Díaz, había manifestado que los procesados debían cumplir "con el mandato de actuar que la buena práctica médica colocaba en sus cabezas", ya que resultaban ser los "garantes" de la condición médica del exfutbolista fallecido.

Caso Diego Maradona: investigarán los roles de cada uno de los imputados

En ese marco, los camaristas definieron en pos a lo que la fiscalía había dispuesto en "sus inconductas" al estar "a cargo de la atención del paciente", y por ende, se deberá determinar el "desempeño de cada uno de ellos" para saber la responsabilidad de los procesados.

Además, los jueces rechazaron los pedidos específicos de los abogados defensores de los procesados respecto a un sobreseimiento y cambio de calificación de ellos. En cambio, hubo un visto bueno respecto a los "Hechos 2 y 3", específicamente en las figuras de Luque y Cosachov, por el "uso de documento privado falso" al neurocirujano por haber presuntamente usado una firma falsificada de Maradona para pedir una historia clínica; mientras que por "falsedad ideológica" a la psiquiatra por haber confeccionado un certificado de aptitud mental de Diego sin revisarlo.

En concreto, los ocho acusados podrían obtener una condena entre 8 y 25 años de cárcel según el grado de responsabilidad que desencadenó en la muerte del "Diez", fallecido por un "edema agudo de pulmón secundario a una insuficiencia cardíaca crónica reagudizada" y una "miocardiopatía dilatada", según la autopsia.

Vale recordar que Maradona estuvo internado en su casa del barrio privado San Andrés, perteneciente al partido de Tigre, por su adicción al alcohol, posterior a una intervención quirúrgica tras detectarse un coágulo entre el cráneo y la base del cerebro.