Tres hombres fueron detenidos este lunes en los calabozos de la Comisaría Novena de Caucete, en San Juan, tras haber sido denunciados por una mujer de 27 años que los acusó de haberla violado en una habitación de un hotel alojamiento en la madrugada del domingo pasado.

Se tratan de tres amigos de entre 25 y 26 años, identificados como Gastón Aciar, Fernando Salinas, y Claudio Ardiles. Los dos primeros son de la propia localidad, mientras que el tercero es oriundo de Santiago del Estero, pero está radicado en San Juan por motivos laborales.

La presunta víctima, una peluquera, que radicó una denuncia en la UFI CAVIG sanjuanina, relató a la prensa la pesadilla que vivió el fin de semana en manos de los tres acusados, causando una enorme indignación en los ciudadanos.

Con uno tuve sexo consentido, los otros dos se metieron a la pieza y me violaron.

Según detalló El Diario de Cuyo, todo comenzó en la noche del sábado pasado, cuando los tres sospechosos llegaron a una casa donde ella se encontraba con unas amigas. Entre bebidas alcohólicas, la mujer “pegó onda” con uno de ellos, y a las 6 de la mañana del domingo, aproximadamente, decidieron irse juntos.

"El chico con el que yo pegué onda iba a llevar a sus amigos a sus casas y me iba a dejar a mí al último. En el camino nos pusimos a joder, íbamos a comprar más bebidas, pero me propuso ir al hotel y me dijo que los otros se iban a quedar en el auto", contó.

Pese a que luego de pagar por la habitación en el hotel entraron los cuatro, a ella no le pareció extraña la situación ni se sintió alertada en primera instancia. Sin embargo, fue allí cuando el horror comenzó a tomar forma:

"En la habitación hay una barra, pedimos una cerveza, jodíamos, nos reíamos, estaba todo re bien. Fuimos a la cama con el chico con el que tenía onda, fue todo consentido. Estábamos los dos tapados y cuando miro, estaban los otros dos sin ropa. Ahí empezó la locura. Uno me agarró de las mechas y me obligó a que le hiciera sexo oral mientras el otro se me prendió de atrás, así como si nada", habría contado entre lágrimas, según el medio.

"Que nadie me juzgue sin haber vivido lo que yo he vivido. Y que ellos paguen por lo que hicieron", denunció la víctima.

Además, agregó, angustiada: “Estaban re locos... no me quiero ni acordar. Nos conocemos, jamás se me cruzó por la cabeza que iban a hacer una locura así, más uno de ellos que es parte de la familia".

Y es que según precisó el diario, uno de los tres sujetos es primo de su marido, mientras que el santiagueño es compañero de trabajo del hombre con el cual se había encariñado.

El desenlace de esta historia concluye con un botellazo que le lastimó la boca al momento en el que intenta escaparse de la habitación. Asimismo, la supuesta víctima denunció que le dejaron moretones en la espalda, rasguños en los brazos, y lesiones que, según ella, fueron constatadas por un médico legista.

“Sinceramente estábamos todos tomados, muy alcoholizados. Agarré mi ropa y les dije que me llevaran a la casa de mi amiga. Ellos me decían que era una broma, que no me enojara, querían hacer como que nada había pasado. Cuando salimos se me burlaban, me decían que era una gorda p... que no podía hacer que se les parara, me denigraban y se reían a carcajadas", acusó.

Al llegar a una estación de servicio aledaña, la amenazaron con contarle a su marido y a sus suegros sobre lo ocurrido. No obstante, en cuanto pudo marcó al 911 y los tres acusados fueron apresados al instante. Ahora enfrentan una investigación a raíz de la denuncia de la mujer en el Cavig, y el caso es investigado por el fiscal Miguel Gay.

Estoy para la miércoles, no puedo dormir ni comer. Leer los comentarios de la gente me puso re mal, intenté tomar un montón de pastillas y mi marido me frenó.