Doble crimen del matrimonio en Vicente López: ¿Cómo vive sus días en la cárcel el presunto parricida?
Martín del Río cumplió su primera semana tras las rejas como el único acusado mientras avanza la causa.
A una semana desde que ordenaron su detención, Martín Del Río, acusado de matar a balazos a sus padres en el interior de un auto en la localidad bonaerense de Vicente López, pasa sus días aislado en un calabozo, sin visitas, y apenas una muda de ropa y un libro.
Mientras permanece recluido en la DDI de San Isidro, el presunto parricida hasta ahora no fue visitado por sus hijos ni su esposa. Sin embargo, la abogada de su mujer se habría contactado con su defensor para pedirle el divorcio.
Su nueva letrada, Mónica Chirivin. lo describió como "un hombre quebrado". Además, señaló que su hermano, Diego Del Río, solo se acercó para dejarle una nota, papel higiénico y agua mineral y que "le prometió que no lo iba a dejar solo, pero no le acercó un abogado”.
El hijo menor del matrimonio asesinado difundió una carta, en la que refirió: “Desde los 19 años estoy de novio y casado con la persona más maravillosa del mundo, Cecilia”. Y completó respecto a sus hijos: “Los amo y ustedes saben quién es su padre y cuánto amaba a sus abuelos”.
Una fuente penitenciaria indicó a los medios que “se lo ve tranquilo”, y que estaría “como en el living de su casa. Sentado y con las piernas estiradas, leyendo el libro”.
El texto que lo ayuda a distraerse en sus primeras horas de encierro es “La Sociedad de la Nieve”, una historia escrita por el periodista uruguayo Pablo Vierci sobre la catástrofe aérea de los Andes.
Su abogada se reunió con él en la DDI durante tres horas. “Lloró toda la tarde. Siente el abandono de su hermano, de su esposa y de sus hijos”, remarcó.
¿Cómo sigue la investigación?
En diálogo con Telám, Chirivin aseguró: “Voy a gritar su inocencia a los cuatro vientos. Podrá tener negocios turbios o una ambición desmedida, pero eso no lo convierte en un asesino. Hay muchas cosas que evaluar. Él tenía un poder general para hacer lo que quisiera con los bienes, ¿para qué los mataría?”.
En ese sentido, la letrada anticipó que pedirá algunas medidas de prueba con el objetivo de corroborar la versión de su defendido. Entre ellas están las cámaras de seguridad que avalarían su “coartada”, algo que para los fiscales fue plantado.
“Todos dicen que el móvil es económico, pero Martín era el apoderado. ¿De qué le sirve matar a sus padres si tenía acceso a todo? Ahora todo está congelado, se quedó sin nada. De un patrimonio que no es tal, además”, justificó Chirivin.
Según la mujer, las deudas y la “forma de hacer negocios” eran lo que complicaba la situación económica de los Del Río, no la mala administración de su defendido. “Lo han dejado solo y su condena es social, pero acá rige el principio de inocencia”, insistió.