Caso Cecilia Strzyzowski: Fabiana González, mano derecha del clan Sena, aseguró que vio un "bulto envuelto en una manta"
La asistente del matrimonio integrado por Emerenciano Sena y Marcela Acuña, una de las siete detenidas por el femicidio de la joven de 28 años, declaró en las últimas horas ante los fiscales y aportó datos relevantes para la causa.
"Vi un bulto envuelto en una manta marrón", dijo en su indagación, Fabiana González, una de las siete detenidas por el femicidio de Cecilia Strzyzowski (28), la joven de 28 años desaparecida, el pasado 2 de junio. La imputada, era asistente del matrimonio integrado por Emerenciano Sena y Marcela Acuña. Hasta el momento todos detenidos.
En la declaración que brindó el lunes por la noche durante más de tres horas ante el Equipo Fiscal Especial (EFE), integrado por los fiscales Jorge Cáceres Olivera, Jorge Gómez y Nelia Velázquez, que investigan el caso, la imputada detalló haber visto ese "bulto" cerca de las 17 del pasado 2 de junio, en la misma habitación en la que dijo haberlo visto, pero a las 16, la también detenida Acuña, suegra de Cecilia y madre del también detenido César Sena. Tras lo cual aseguró que salió "corriendo".
González dijo que en ese momento entendió que lo que acababa de ver podía ser un cuerpo, aunque no aportó detalles de lo que luego hicieron con él, como hizo su marido, Gustavo Obregón, quien fue el que indicó a los pesquisas dónde fueron descartadas dos bolsas con objetos y lo que serían restos óseos de Cecilia.
Al ser consultada, respecto a si conversó al respecto con Obregón, González dijo que "casi no se hablaba con él", que estaban peleados y que después de ver el bulto discutieron.
Además, la imputada dijo a los fiscales que teme "por su seguridad" y, tras la indagatoria, fue trasladada bajo un fuerte operativo del Servicio Penitenciario de Chaco hacia la alcaidía, donde continuará detenida.
Tanto González, como su pareja, Gustavo Obregón fueron imputados por el equipo de fiscales como coautores del femicidio. Tras la declaración de Obregón, la semana pasada, se ordenaron rastrillajes en el río Tragadero que permitieron dar con restos óseos que serían humanos.
“Llegamos a las 20.30 aproximadamente a la casa de César (Sena) y él baja e ingresa al domicilio. Al ratito sale con un bolso o valija —no recuerdo bien— y una mochila. Era una valija que creo que tenía manija —no recuerdo color— y no sé si tenía rueditas”, expresó en su declaración voluntaria sobre lo que habría ocurrido el martes 6 de junio por noche, pasadas las 20.
Y continuó: “Pusimos en el asiento de atrás de mi auto tanto la mochila como la valija. Subimos al auto y César me dice: ‘Vamos al barrio’. Llegamos al barrio y en la última calle asfaltada del barrio, que se llama Colo —sería la San Martín, la que sigue—. César me dice: ‘Frená acá’”.
“Se bajó y ahí en la banquina nomas, se baja César: bajó la mochila y la valija y ahí nomás prendió fuego con un encendedor, bien al lado del cordón. Habrá tardado cinco minutos aproximadamente en agarrar el fuego, se ve que era todo ropa. Pero ni esperamos que agarre completamente, cuando vio César que estaba prendiendo más o menos me dijo: ‘Vamos’”, detalló.
En ese contexto, el equipo de antropólogos forenses de Córdoba que trabajó en el análisis de los primeros huesos hallados, viajará a Resistencia para analizar estos restos. En tanto, para este jueves está previsto que los investigadores judiciales pidan las prisiones preventivas de los siete acusados.
