El mítico y aterrador "Perro Familiar" intentó matar a un obrero en Salta: "Vino a llevarse un alma"
El trabajador aseguró haber sido arrastrado por la bestia demoníaca hacia un canal de agua. El hombre tuvo que ser llevado de urgencia al hospital. ¿De qué se trata la leyenda de "El Familiar", popular en Tucumán, Salta y Jujuy?
La leyenda del "Familiar" es altamente conocida en el norte de nuestro país y varias personas dicen haberlo visto y escapado de sus garras, tal es el caso de un obrero que se encontraba en una loma cerca del ingenio Tabacal, en el norte de Salta, tuvo que ser trasladado al hospital luego de ser “arrastrado” hacia el interior de un canal.
Sus compañeros afirman que desde hace varios días las “apariciones” son constantes y temen que sea “El Perro Familiar”, quien regresó a la tierra para llevarse un alma.
Las creencias en mitos milenarios siempre reaparecen y en esta ocasión, un grupo de trabajadores aseguró haber visto “espectros” y se animaron a esbozar su temor por el regreso de “demonio”.
“El Familiar vino molesto, Dios nos salve, pero este animal vino para llevarse un alma”, aseguraron asustados varios trabajadores del lugar.
¿Qué animal es “El Familiar”?
El asunto es que la leyenda del “Familiar” es muy conocida en Tucumán, Salta y Jujuy y quienes creen en ella aseguran que el diablo se corporiza en un caballo negro, enorme, al que puede verse claramente paseando por entre los cañaverales, en noches de luna llena.
De acuerdo con el relato, el pacto lo realizaban los dueños de las tierras, quienes siembre buscaban algún modo de aumentar su poder.
Para tener mayor abundancia debían entregar un alma al diablo, siendo siembre sus víctimas vagabundos, indios, gauchos o algún obrero que se animaba a quejarse por las condiciones de vida en las que trabajaban.
El caso más conocido de la aparición de “El Familiar” sucedió en el ingenio Santa Ana, propiedad del francés Clodomiro Hileret en la provincia de Tucumán.
Opinión sobre "Familiar"
Según un historiador, a Hileret le sirvió para “retener” a muchos obreros: “No es complicado de entender por qué Hileret funda esta leyenda compuesta por elementos griegos y cristianos para lograr la dominación y el terror del conjunto de los trabajadores. Era necesario que éstos aceptaran resignadamente su destino y que volcaran sus pensamientos hacia la religión, si el diablo andaba suelto se confirmaba la existencia de dios y nada es más seguro que pedir su protección", explicó.
"Dan cuenta de esto las recomendaciones para evitar ser devorado: usar crucifijos grandes en el pecho, también llevar rosarios enormes atados al cuerpo y un puñal de plata. Como se ve la forma de protegerse era reforzar los íconos católicos", dijo.
"Era necesario ser más católico -lo que implicaba la resignación en la tierra y la espera de la salvación en la vida eterna- y renunciar a cualquier tipo de rebeldía que pusiera en cuestión el poder del patrón. Lo cierto es que más allá de estos talismanes los rebeldes eran secuestrados y morían solos en una oscura sala de máquinas”, aseguró el especialista.